Alemania: el nuncio se dirige a los obispos alemanes en Fulda

Fuente: FSSPX Actualidad

Monseñor Nicola Eterovic

Del 26 al 29 de septiembre de 2022, la Conferencia Episcopal de Alemania (DBK) celebrará su reunión anual de otoño en Fulda. En esta ocasión, es tradicional que el nuncio apostólico le dirija unas palabras. 

El arzobispo Nicola Eterovic, originario de Croacia, ha sido nuncio apostólico en Alemania desde septiembre de 2013. En su discurso de introducción a la asamblea en Fulda, habló sobre la sinodalidad, la colegialidad y la comunión, antes de pronunciar las palabras de clausura.

Estos comentarios fueron una crítica abierta al Camino Sinodal alemán. El nuncio explicó que el Sínodo no es un parlamento, ni un sondeo de opinión. Añadió que "no hay que caer en un parlamentarismo donde se establecen mayorías y minorías y se ejercen presiones indebidas para conseguir los objetivos perseguidos".

Otro comentario hizo referencia a la libertad de los obispos y al voto: "para preservar la libertad de los obispos, normalmente no se admiten periodistas", pero ¿qué pasa con todos estos laicos que abarrotan los pasillos del Camino sinodal?"

El voto nominal impuesto a los obispos durante la cuarta Asamblea Sinodal también fue atacado: "El voto secreto es además uno de los métodos de la Iglesia, practicado durante siglos para votaciones importantes, para la elección de los superiores en muchas órdenes y congregaciones, hasta la elección del Papa en cónclave", explicó.

También recordó el comunicado del 21 de julio de 2022, que atribuyó "al Papa, a la Secretaría de Estado y a los órganos de la Curia romana", y en el que precisó que el Camino Sinodal "no tiene potestad para 'forzar los obispos ni a los fieles a adoptar nuevas formas de gobierno y nuevas orientaciones doctrinales y morales', como ha sido el caso recientemente.

El texto de la declaración prosigue: "No está permitido introducir en las diócesis, antes de un acuerdo concertado a nivel de la Iglesia universal, nuevas estructuras oficiales o doctrinales que constituirían una violación de la comunión eclesial y una amenaza para la unidad de la Iglesia". 

Finalmente, el nuncio insistió en que "los obispos tienen un papel esencial, intransferible, indelegable".

En sus palabras de apertura, el presidente de la DBK, el obispo de Limburgo, monseñor Georg Bätzing, reivindicó previamente el apoyo del Papa Francisco al Camino Sinodal. "El Papa mismo es un gran reformador, por lo que no es una buena percepción decir que es un opositor del Camino Sinodal", dijo.

Estas críticas, bien dirigidas, son sin duda bienvenidas; pero ¿serán suficientes estos comentarios para causar una impresión en los obispos que hasta el momento han rechazado toda crítica?