El priorato de Nigeria celebra su décimo aniversario

En diez años, el ministerio se ha desarrollado muy bien y de manera progresiva, garantía de calidad y seriedad. Los sacerdotes atienden siete centros de misa, además del Priorato.

El más importante es el de Lagos, el Nueva York de África Occidental. Los domingos, el Priorato recibe la visita de poco más de 250 fieles de forma habitual, pero la comunidad de Lagos no se queda atrás con una asistencia de 220 fieles.

Del resto de esta comunidad la misión recibe el fruto más precioso de su apostolado: las vocaciones sacerdotales. Dos de sus jóvenes fieles ya están en nuestros seminarios mientras que otros dos se preparan en el Priorato para unirse a ellos.

La capital federal, Abuja, recibe una visita semanal, aunque en circunstancias difíciles. La misión no es dueña de la capilla, que es demasiado pequeña para ser equipada más de lo que actualmente está.

Además, Abuja se encuentra en la parte musulmana de Nigeria, donde la presión social y la inseguridad dificultan la vida de los católicos. Sin embargo, nuestra pequeña comunidad de 80 fieles aumenta cada vez más.

Las localidades de Onitsha, Port-Harcourt y Oji River también son visitadas por los sacerdotes. La primera todos los domingos, las demás alternativamente. Tenemos alrededor de 250 fieles en total.

En Port-Harcourt, la comunidad de fieles reúne alrededor de sesenta personas jóvenes verdaderamente convencidas. Estos jóvenes padres de familia actualmente están construyendo una iglesia, con los recursos muy limitados de que disponen los nigerianos.

Para compensar la falta de fondos, dedican su tiempo libre para realizar los trabajos que les son accesibles, cavando los cimientos, moldeando bloques de cemento, etc. Estos fieles verdaderamente merecen ser apoyados debido a sus sacrificios y generosidad en este proyecto.

Finalmente, se hacen viajes irregulares, diríamos de prospección, a Accra, en Ghana (de habla inglesa) y a Cotonou, en Benin (de habla francesa). Además del pequeño núcleo de fieles convencidos, se suma a cada visita un número muy irregular de curiosos.

El evento más importante de este último año fue la mudanza al nuevo edificio, construido principalmente gracias a las donaciones de los fieles de Suiza, pero también de muchos otros. Los sacerdotes se instalaron en una casa de tres plantas con una capilla, lugares comunitarios, dormitorios y tres aulas.

Pero los proyectos siguen siendo numerosos: la iglesia de Port-Harcourt y el acondicionamiento del tercer piso del Priorato para los pre-seminaristas y los hermanos pre-postulantes.

Podemos asegurarles que los sacerdotes, pre-seminaristas y fieles del Priorato ofrecen diariamente sus rosarios por sus bienhechores. ¡Gracias por cualquier ayuda espiritual o material!

Incluimos abajo el n° 16 de la revista SOS Africa.

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