Obispo de Estados Unidos pide a sus fieles recibir comunión en la lengua

Fuente: District of the USA

Mons. Morlino en una foto reciente, celebrando el Santo sacrificio ad orientem.

El 11 de abril del 2017, Monseñor Robert Morlino, obispo de Madison, Wisconsin, pidió a los fieles de su diócesis empezar a recibir la santa comunión de rodillas y en la lengua.

Druante su sermón de la Misa del Jueves Santo, Monseñor Morlino habló sobre la preocupación del Cardenal Sarah sobre la actual "crisis de fe." Respecto a estas palabras, el obispo dijo: “Esta crisis es una crisis de oración, porque rezamos como creemos. La fe y la oración nunca pueden separarse. ¿Y cuál es nuestra oración más importante? ¡La Misa!”

El obispo añadió que uno de los puntos clave para hacer crecer la fe es la reverencia durante la Misa. Le pidió a los sacerdotes de su diócesis animar a la gente a recibir la comunión en la lengua y de rodillas.

Según el P. Richard Heilman del blog Roman Catholic Man, Mons. Morlino declaró:

Les pido que avancemos juntos hacia una mayor reverencia para recibir la Sagrada Comunión. Les pido que animemos a los fieles a recibir la Comunión en la lengua y de rodillas. No hay duda alguna de que la Comunión en la lengua es mucho más reverente. Y no se presta a conductas poco apropiadas. Les pido que, a partir de este otoño, nuestros estudiantes sean enseñados a recibir la Comunión en la lengua. 

Mons. Morlino fue uno de los primeros obispos en responder al llamado del Cardenal Sarah a celebrar la Misa ad orientem. También hizo mover el Sagrario de vuelta al altar principal en sus iglesias. Aunque, desafortunadamente ha exhortado a los fieles de su diócesis a no asistir a las Misas celebradas por los sacerdotes de la Fraternidad San Pío X por miedo a absorber lo que denomina “una mentalidad cismática,” él mismo dice la Misa Tradicional en latín frecuentemente y la ha promovido en su diócesis.

La Comunión en la lengua es una tradición apostólica

  

Como lo afirma el P. Richard Heilman, la Comunión en la lengua es una tradición apostólica. Dicha afirmación se encuentra respaldada en las palabras de los Padres de la Iglesia, los Concilios, y los Papas. Durante el 6to Concilio Ecuménico de Constantinopla (680-681), por ejemplo, se prohibió expresamente a los fieles tomar la Sagrada Hostia en su mano, y los transgresores corrían el riesgo de ser excomulgados. Sto. Tomás de Aquino dice:

Por reverencia a este Sacramento [la Sagrada Eucaristía], nada debe tocarla, salvo lo que esté consagrado; de aquí que el corporal y el cáliz sean consagrados, y asimismo las manos del sacerdote, para tocar este Sacramento (Summa Theologica, Parte III, Q. 82, Art. 3, Rep. Obj. 8

St. Marys en Pine Bluff, WI, parroquia que lidera este movimiento tradicional en la Diócesis de Madison.

Comunión en la mano: ¿un acuerdo para los abusos?



La práctica de recibir la Comunión en la mano no fue instituida por Vaticano II, ni fue resultado de la demanda de los fieles, escribió el Cardenal Ranjith en 2008. Por el contrario, argumenta, la práctica piadosa establecida—recibir la Eucaristía de rodillas, en la lengua— fue cambiada “impropia y apresuradamente.”

De hecho, esta práctica abusiva comenzó a esparcirse en el mundo católico a principios de los 60s, principalmente en Holanda. Conforme se fue extendiendo después de Vaticano II en Holanda, Bélgica, Francia y Alemania, Paulo VI realizó una encuesta entre los obispos del mundo para conocer su opinión al respecto. El 28 de mayo de 1969 la Congregación para el Culto Divino publicó su conclusión tras considerar las respuestas de los obispos. “De acuerdo a las respuestas recibidas, es evidente que la gran mayoría de obispos siente que la actual disciplina [i.e., recibir la Sagrada Comunión en la lengua] no debe ser cambiada en absoluto, y que cambiarla sería una ofensa a la sensibilidad y apreciación espiritual de estos obispos y de la mayoría de los fieles" (Memoriale Domini, Mayo 28, 1969).

Sin embargo, Paulo VI hizo un acuerdo con los obispos desobedientes y dada “la gravedad del asunto,” no autorizó la Comunión en la mano, pero concedió un indulto (una excepción a la regla) bajo ciertas condiciones:

  • El indulto no podía ser dado en un país en que la Comunión en la mano no fuera una práctica ya establecida.
  • Los obispos de países donde ya lo fuera debían aprobar la práctica “por voto secreto y con una mayoría de dos tercios.”

La Santa Sede dictaminó siete normas concernientes a la Comunión en la mano; la desobediencia de las cuales podía resultar en la anulación del indulto. Las primeras tres normas son:

  1. Respetar a los fieles que mantengan la práctica tradicional (de recibirla hincados y en la lengua)
  2. Mantener el debido respeto de los fieles hacia la Eucaristía
  3. Fortalecer la fe de la congregación en la Presencia Real

Sin embargo, una vez que esta puerta fue abierta, el indulto se convirtió en la manera normativa en que los fieles recibirían la Comunión.

Presión en los Estados Unidos



La Comunión en la mano fue permitida oficialmente en Estados Unidos en 1977, bajo presión y manipulación del Arzobispo Joseph Bernardin, entonces presidente de la Conferencia Nacional de Obispos Católicos (NCCB por sus siglas en inglés), quien, incapaz de lograr la mayoría de dos tercios, recolectó “votos en ausencia” de cualquier obispo que pudiera encontrar; incluyendo obispos retirados que ya no tenían ninguna diócesis a su cargo.

Hoy en día, la NCCB dicta claramente que la Comunión puede ser recibida en la mano o en la lengua, a decisión del individuo que la recibe y no del ministro que la distribuye.

Pérdida de Respeto hacia la Eucaristía

 

La reglamentación dada por Paulo VI como condición para el indulto ha sido ampliamente ignorada. Dicha práctica abusiva ha llevado a una habitual falta de respeto y blasfemias, y por consiguiente a una disminución (e incluso a la pérdida) de la debida creencia en la Eucaristía por la relación entre acción y pensamiento, lex orandi, lex credendi.

Por la Gloria de Dios y la salvación de las almas es momento de que los obispos tomen las medidas necesarias para suprimir esta práctica abusiva y ofensiva que se ha convertido en la norma a través de un inoperante y débil indulto.

Fuentes: Life Site News / NewLiturgicalMovement.org / RomanCatholicMan.org / sspx.org - 05/17/17