Resolución del Parlamento Europeo sobre la decisión de la Corte de Estados Unidos

Fuente: FSSPX Actualidad

El 7 de julio de 2022, el Parlamento Europeo aprobó una resolución sobre la decisión de la Corte Suprema de Estados Unidos que anuló la famosa sentencia Roe vs Wade, en virtud de la cual había sido posible impedir las leyes antiaborto en varios Estados, en nombre de la jurisprudencia federal.

El organismo europeo señala, con despecho y rabia contenida, que la decisión de la Suprema Corte pone "punto final al derecho constitucional federal al aborto", lo cual es jurídicamente inexacto: nunca ha existido un derecho constitucional, ya que este derecho habría tenido que ser consagrado en la constitución estadounidense, que no es el caso, como indicó la Corte Suprema.

La resolución continúa señalando que "ocho Estados ya han prohibido el aborto; veintiséis Estados eventualmente aprobarán leyes que prohíban casi por completo el aborto; trece Estados aprobaron las llamadas leyes 'activadoras', que entraron en vigor inmediatamente después de que se anuló la decisión de Roe v. Wade", y amplía las reacciones observadas en Estados Unidos ante esta sentencia.

A esto sigue un texto sobre las consecuencias para las personas vulnerables y la negación de sus derechos reproductivos y sexuales. La sentencia expone las posibles complicaciones del embarazo y el parto, la principal causa de muerte en el mundo entre las adolescentes de 15 a 19 años, ¡como si los hospitales estadounidenses estuvieran clasificados entre los peores del planeta en competencia y eficiencia!

El texto continúa expresando su preocupación por lo que está pasando incluso en Europa, por ejemplo, en Polonia, Malta, Eslovaquia y Hungría, que limitan, de diversas formas, el acceso al aborto.

De la observación, la resolución pasa a las condenas: contra Estados Unidos, pero también contra ciertos países miembros de la Unión Europea, los mencionados anteriormente.

Y luego viene el punto más importante: el texto "propone introducir el derecho al aborto en la carta [europea]; considera que debería presentarse una propuesta al Consejo para modificar la Carta de los Derechos Fundamentales de la siguiente manera: Artículo 7 bis (nuevo) "Toda persona tiene derecho a un aborto seguro y legal".

Finalmente, la resolución llama a "la Unión y sus Estados miembros a reconocer legalmente el aborto y defender el respeto al derecho al aborto seguro y legal y otros derechos sexuales y reproductivos".

Y, por último, la guinda del pastel, el texto "recomienda enviar una delegación a Estados Unidos lo antes posible para evaluar las implicaciones de la decisión de la Corte Suprema y apoyar a las ONG de derechos de las mujeres y los movimientos pro-elección del país".

Ya no es suficiente que el Parlamento Europeo quiera regular la política interna de los Estados miembros, incluso desafiando su constitución, sino que también quiere ser el gendarme de lo que sucede en Estados Unidos y de las decisiones de la Corte Suprema de Justicia de este país.

El Parlamento Europeo se revela como lo que es: el frente de un totalitarismo del pensamiento único, que quiere apoderarse del poder político e imponer su destrucción por todas partes.