Vaticano: Ghirlanda niega ser responsable de una supuesta reforma del cónclave

El cardenal jesuita de 81 años lo niega categóricamente: "Antes de su correo electrónico, no tenía noticias de la reforma del cónclave que menciona. (…) Es absolutamente falso", añadió sobre el rumor de reforma.

Una información lanzada por dos periódicos

El domingo 5 de noviembre, The Pillar, seguido de The Remnant, informó que el Papa Francisco había encargado al cardenal Ghirlanda redactar un proyecto de reforma del cónclave y modificar el documento anterior que data de 1996, durante el pontificado del Papa Juan Pablo II, Universi dominici gregis (UDG).

Citando "fuentes cercanas a la Secretaría de Estado", The Pillar escribe que los cambios afectarían a las congregaciones generales que preceden a la votación de los cardenales. Según UDG, estas congregaciones generales están abiertas a todos los cardenales, sin límite de edad.

Cambios en las congregaciones generales

Estas congregaciones generales permiten intercambios entre todos los cardenales. Están sujetas a la misma "obligación de secreto" que la votación para la elección de un nuevo Papa. El primer cambio, según The Pillar, excluiría a los cardenales mayores de 80 años: solo los cardenales elegibles, menores de 80 años, podrían asistir a las congregaciones.

Un segundo cambio modificaría el desarrollo de estas congregaciones, inspirándose en un estilo más sinodal, escribe The Pillar. Los discursos a todo el Colegio Cardenalicio serían reemplazados por sesiones de estilo sinodal, con mesas redondas para "conversaciones espirituales", seguidas de informes a toda la asamblea que resumirían las discusiones en esas mesas.

¿Votantes laicos en el cónclave?

The Remnant añade que el Colegio Cardenalicio ya no sería el único elector del nuevo Papa: Ghirlanda intentaría persuadir al Papa Francisco para que permita a hombres y mujeres laicos, así como a religiosas, representar hasta el 25% de los electores del Papa. The Remnant cita "fuentes vaticanas bien informadas".

The Pillar también aludió a la participación de los votantes laicos, afirmando que "altos clérigos romanos dijeron que también había rumores de que el Papa Francisco está considerando la idea de invitar a los laicos a participar en las congregaciones generales". El periódico añadió que no podía confirmar la veracidad de esta información.

Cabe señalar que el cardenal Ghirlanda es el canonista favorito del Papa: estuvo muy involucrado en la reforma de la Curia Romana finalizada por la constitución Praedicate evangelium, que permitió a los laicos ocupar puestos de liderazgo dentro de la Curia. También reemplazó al cardenal Raymond Burke como patrono de la Orden de Malta después de haber reformulado su Constitución.

Exrector de la Universidad Gregoriana de Roma, el cardenal Ghirlanda ha expresado posiciones ultramodernistas, sosteniendo que el Papa puede delegar la jurisdicción eclesiástica a los laicos… lo que es contrario tanto a la ley divina como a un texto –erróneo– del Concilio Vaticano II, Lumen gentium. Esta última afirmación despertó la indignación del cardenal Gerhard Müller.

En cualquier caso, la rotunda negación del cardenal Ghirlanda parece poner fin al ruido de la reforma del cónclave. ¿A menos que alguien más esté a cargo? Lo cual parece poco probable.