
Desde hace varios meses, el Papa Francisco ha mostrado serias dificultades para moverse. Este 30 de abril de 2022, mientras recibía a un grupo de peregrinos de Eslovaquia, declaró que su pierna "no estaba bien", e incluso agregó: "mi pierna no funciona". El pontífice dijo que su médico le aconsejó no caminar.
El 2 de mayo, tuvo que recibir a sus visitantes en Santa Marta y no en el Palacio Apostólico, para evitar los viajes. El 3 de mayo recibió una inyección en la rodilla derecha para aliviar el dolor. El 5 de mayo apareció en silla de ruedas durante una audiencia concedida a un grupo de líderes de órdenes religiosas femeninas. Y el 9 de mayo, se dio a conocer la noticia de que el viaje del Papa al Líbano, previsto para los días 12 y 13 de junio, había sido pospuesto.
Un prelado romano define las prioridades para el próximo pontificado
Este preocupante estado de salud hace que los observadores romanos se pregunten cada vez más sobre el futuro Papa. Por ejemplo, monseñor Nicola Bux, exasesor de la Congregación para la Doctrina de la Fe, habló en una entrevista concedida a Diane Montagna para The Remnant, el 16 de abril, sobre el misterioso memorando firmado por "Demos", publicado por Sandro Magister (DICI n°419, abril de 2022).
El teólogo romano presentó un severo balance del pontificado actual: "Para la mayoría de los vaticanistas, la evaluación del pontificado de Francisco, desde la doctrina de la fe hasta la moral, muestra un déficit en comparación con sus predecesores, sin mencionar las finanzas. Este pontificado ha contribuido a exacerbar la secularización de Occidente, ya que el Papa intervino social y políticamente y apoyó una espiritualidad sin identidad. Surge entonces la pregunta: ¿qué es el ministerio petrino?"
Monseñor Bux señala, de paso, que "muchos de los que al principio apoyaban a Bergoglio se han distanciado del pontificado actual y ahora lo consideran caótico y despótico".
El prelado muestra cómo se manifiesta concretamente la descristianización del continente sudamericano: "En el Vaticano, somos muy conscientes de la apostasía de los católicos en América Latina, que han disminuido al 52%, frente a un crecimiento del 25% de las sectas.
El 13 de enero, el Wall Street Journal publicó el siguiente titular (porque la Iglesia está perdiendo América Latina): "La Iglesia católica prefirió a los pobres y los pobres prefirieron a los pentecostales". Esta es una enorme contribución al proceso de autodestrucción del que hablaba Pablo VI.
La Iglesia se ha transformado en un organismo encargado de solucionar problemas sociales, económicos, psicológicos y hasta ambientales, abandonando su misión de salvar almas. En el Sínodo sobre la Amazonía, el objetivo no era reevangelizar la región, sino el medio ambiente, ni favorecer un encuentro personal con el Señor, sino cuestiones políticas y sociales. En resumen, mientras los fieles piden más religión, los obispos proponen el socialismo".
Cuando se le preguntó sobre la influencia que podría tener este memorándum en el próximo cónclave que elegirá al futuro Papa, monseñor Bux respondió: "Como cualquier cristiano, el Papa está sujeto a la ley divina revelada, y antes de eso a la ley natural, luego al derecho canónico, que lo vincula a la doctrina y a la constitución esenciales de la Iglesia, que no es sinodal sino jerárquica. El memorándum parece recordar eso".
Sobre las prioridades que deberían ser las del próximo Papa, el teólogo romano recuerda la necesidad de "elegir un Papa que promueva la fe católica, que ponga fin a la reducción del número de sacerdotes y fieles en Occidente provocada por la secularización que ha penetrado en la Iglesia".
El prelado también denuncia en la enseñanza eclesiástica actual: "un lenguaje políticamente correcto depurado de toda connotación religiosa, la pérdida del sentido de los límites (los casos de aborto, del matrimonio llamado 'homosexual', del género, de la eutanasia...), la pérdida de lo sagrado y la transformación de la fe religiosa en una religión "humanitaria", del Evangelio en moralismo, y de la homilía en encuentro político."
Por tanto, según su opinión, "la prioridad del cónclave es elegir un Papa católico, de lo contrario la pérdida de la fe no será solo el efecto sino también la causa de la secularización del cristianismo, que acabará por ser insignificante".
Y agrega: "El próximo cónclave tendrá que aclarar qué significa ser "pastoral": nadie lo sabe hasta ahora, y esta palabra se usa como llave maestra para justificar todo en la Iglesia".
Monseñor Bux insiste: "El próximo Papa debe tener como prioridad en su agenda la promoción y el crecimiento de la fe, para que las familias cristianas y las vocaciones sacerdotales y religiosas puedan florecer. Debemos volver al Magisterio, que decide infaliblemente las cuestiones de la moral familiar, nombrando obispos que acepten la tradición apostólica.
El cisma ya latente [cada vez menos latente, e incluso muy patente con el Camino Sinodal en Alemania. NDLR] probablemente se mitigará, incluso si la persecución por parte de los medios seculares aumenta".
El prelado aboga por "un pontificado que se vuelque hacia un catolicismo que llene las iglesias de fervientes creyentes y la plaza pública de testigos de la fe y de la vida, demostrando que 'funciona' porque produce conversiones".
"La Iglesia católica debe tener un Papa que diga y haga lo que es católico, moral, doctrinal y litúrgicamente hablando. ¿Recuerda usted la portada de la revista Time: '¿Es católico el Papa?' ¿Sería extraño que la Iglesia católica tuviera derecho a un Papa católico?"
Y concluye con precisión y sin rodeos: "Para poner fin a la confusión en la Iglesia, el próximo cónclave deberá buscar candidatos que respondan a las Dubia sobre Amoris laetitia, que corrijan Evangelii gaudium donde se dice que el peor mal social es la desigualdad, es decir, una mala distribución de la riqueza, y no el pecado;
"Laudato si’ en la que se exalta el ecologismo neomalthusiano, que es por el contrario la fuente de todos los problemas de los últimos cincuenta años; Fratelli tutti que declara el fin del capitalismo, y luego sugiere cómo sobrevivir y se disfraza con las palabras mágicas "inclusión" y "sostenibilidad"."
Continuará...