Mezquita de Santa Sofía: el sueño de Erdogan se hace realidad

Julio 13, 2020
Origen: fsspx.news

El 10 de julio de 2020, el Consejo de Estado turco derogó el decreto del 27 de noviembre de 1934 para transformar la iglesia de Santa Sofía en un museo. Ahora, ya no hay nada que impida que este lugar simbólico del Imperio bizantino se convierta nuevamente en una mezquita.

"Nuestra nación ha estado esperando esto desde hace 86 años. El tribunal acaba de levantar la prohibición que afectaba a Santa Sofía", escribió el 9 de julio un columnista de Hürriyet, el diario turco cercano al partido islámico conservador. Por su parte, el jefe de estado indicó sobriamente en su cuenta de Twitter: "Se decidió que Santa Sofía será colocada bajo la administración de la Diyanet (Autoridad de Asuntos Religiosos) y será reabierta a las oraciones".

La decisión tomada de forma unánime por un Consejo de Estado en manos del presidente Recep Tayyip Erdogan, tiene un importante trasfondo político, pues le permite al guardián de la Puerta Sublime adquirir una nueva legitimidad -en un momento en que se ha visto cuestionado por una parte del electorado turco- y presentarse como aquel que puede restaurar, en la región, el área de influencia del antiguo Imperio otomano.

La Santa Sede había mantenido una actitud discreta sobre esta delicada cuestión, hasta que el Papa Francisco declaró, al término del Ángelus del domingo 12 de julio, sentirse "muy afligido" por esta decisión de transformar la antigua basílica en una mezquita: "Mi pensamiento va a Estambul, pienso en Santa Sofía. Estoy muy afligido", comentó brevemente.

Las reacciones más hostiles provienen del mundo ortodoxo. El patriarca del culto autocéfalo ruso, Kirill, expresó su "amargura" y su "indignación", ante lo que considera un "intento de humillar o pisotear el patrimonio espiritual milenario de la Iglesia constantinopolitana". Para el líder religioso ruso, "una amenaza para Santa Sofía es una amenaza para toda la civilización cristiana".

Erigida en el siglo IV sobre las ruinas de un antiguo templo dedicado a Apolo, la "Gran Iglesia", como se le llamaba anteriormente, ha sufrido varios desastres. Su aspecto actual data del siglo VI, cuando el emperador Justiniano emprendió la tarea de reconstruir el edificio y dedicarlo a la Sabiduría divina.

Después de más de un milenio, testigo de la renovación ininterrumpida del sacrificio incruento del Calvario, la basílica fue transformada en una mezquita cuando los musulmanes tomaron la ciudad el 29 de mayo de 1453.

Secularizada en 1934 por Atatürk, una medida aún impugnada por la franja islamista, el edificio se convirtió en un museo. Con la decisión del 10 de julio de 2020, el llamado del muecín podrá escucharse una vez más bajo la cúpula de Santa Sofía que, desde la altura de sus cincuenta y cinco metros, continúa evocando las suntuosas coronaciones de los últimos emperadores romanos de Oriente, y los sermones pronunciados antiguamente por el ilustre San Juan Crisóstomo.

Apremiado por los plazos electorales, el presidente turco ya anunció un culto musulmán que se llevará a cabo en Santa Sofía el viernes 24 de julio, a pesar de las protestas internacionales.