¿Cómo explicar la comunicación pletórica del Papa Francisco? (1)
En los últimos días, el Papa ha aumentado considerablemente sus entrevistas con los periodistas. Así lo señala Andrea Gagliarducci en el Monday Vatican del 11 de julio de 2022: en diez días, "el Papa Francisco concedió tres entrevistas: una a Reuters, publicada en varios episodios, una a la agencia argentina Télam, y otra a Guillermo Marcò, su legendario portavoz en Buenos Aires".
Al vaticanista no solo le interesa el contenido de estas entrevistas, sino que intenta descifrar la estrategia de comunicación del Papa: "Cuanto más se deteriora la salud del Papa Francisco, más presente está en los medios. Cuanto más se habla del fin del pontificado, más quiere mostrar, con imágenes y palabras, que tiene el firme control de la Iglesia".
Y enumera también los cuatro temas que subyacen en esta estrategia de comunicación: "El primer tema es el de la reacción. Al Papa Francisco no le gusta hablar de su sucesión, porque hablar de sucesión significa de facto disminuir el poder de decisión del pontificado.
Durante una reunión con los jesuitas de Eslovaquia, en septiembre de 2021, se quejó de que los cardenales "ya planeaban su funeral" tras su cirugía de estenosis diverticular en el colon, el 4 de julio de 2021. […] [Como reacción] el Papa Francisco multiplicó las apariciones públicas, concedió entrevistas, aprovechó para dar su opinión sobre todos los temas, y empezó a marcar su herencia.
"El segundo tema se refiere al debate en torno al Papa. La reforma de la Curia se está llevando a cabo, pero el Papa Francisco quiere dar el siguiente paso: una discusión con los cardenales. ¿Qué mejor manera que un consistorio? Por primera vez, desde 2015, los cardenales se reunirán para discutir y conocerse.
"El tema será precisamente la reforma de la Curia. Pero no será una reunión para proponer una reforma, sino para ratificarla. El Papa Francisco convocó dicha reunión en agosto, congelando así el debate. Mientras tanto, hace uso de la comunicación pública para transmitir los mensajes que considera más importantes, asegurándose así de que nadie pueda oponerse a sus ideas de reforma.
"El tercer tema se refiere a la necesidad para el Papa Francisco de ser popular. […] Cuando se trata de dar su opinión, Francisco nunca retrocede. En sus intervenciones personales con los medios no hay ningún filtro de la Secretaría de Estado. […] Francisco es un Papa que controla la comunicación y quiere que todo funcione según sus planes.
"Es un Papa que hace un uso astuto y populista de los medios de comunicación. El Papa Francisco envía mensajes fuertes para los temas que no generan división y, a veces, mensajes poco claros para los temas que dividen [como la comunión para los políticos a favor del aborto. NDLR]. […]
"El cuarto tema se refiere a la comunicación de la Santa Sede. El Papa Francisco no suele unir, sino que crea fracturas. Estas entrevistas son generalmente iniciativas personales y se realizan sin filtro, a veces incluso sin que el Dicasterio para la Comunicación sepa nada de antemano. En resumen, nadie gestiona la comunicación del Papa.
"Él decide cómo y cuándo mostrarse. La tarea del Dicasterio es seguir el magisterio y apoyar al Santo Padre. Su tarea no puede ser la planificación de la comunicación, porque es el Papa quien toma las decisiones sobre este punto".
El 14 de julio, en La Nuova Bussola Quotidiana, Riccardo Cascioli retomó el tema de la comunicación del Papa en todas las direcciones: "Francamente, no podemos más con las entrevistas del Papa Francisco. A partir de ahora parecen ser un torrente constante. […] Incluso sus más excesivos admiradores deberían darse cuenta de que se trata de entrevistas que, más allá de su contenido, son en última instancia perjudiciales para la Iglesia y la institución del papado, porque es la autoridad del Papa […] la que se ve disminuida.
Pero, sobre todo, esta inflación engendra entre los fieles -y los no fieles- una confusión entre lo que proviene de la opinión personal (legítima, pero discutible) y lo que proviene del magisterio de la Iglesia, que debería ser la única preocupación real del Papa".
¿Entrevistas concertadas realizadas por periodistas aduladores?
En el sitio web italiano Silere non possumus ["No podemos permanecer en silencio" NDLR], del 12 de julio, leemos esta sentencia: "Cabe señalar que estas entrevistas que concede el Papa, se vuelven un poco como la cuarta cucharada de Nutella: un poco empalagosa.
"Las preguntas de los periodistas son siempre las mismas y, obviamente, no se tratan temas incómodos. Se quiere transmitir la idea de que estas entrevistas son casuales, libres y espontáneas, pero está claro que no se hace ninguna pregunta incómoda al Papa".
Y sustenta esta afirmación con algunos hechos conocidos, pero nunca discutidos en estas entrevistas: monseñor Gustavo Zanchetta condenado por la justicia argentina el 2 de marzo de 2022 por abuso sexual, pero que reside en Santa Marta, cerca del Papa.
El cardenal Giovanni Angelo Becciu, destituido por Francisco, incluso antes de su condena por un tribunal, puesto que su juicio aún está en curso. Las quejas de sacerdotes y fieles adheridos a la misa tradicional, perseguidos por sus obispos en nombre de Traditionis custodes... Este silencio sobre cuestiones espinosas plantea una pregunta: los periodistas que tienen el privilegio de obtener una entrevista con el Papa, ¿no son más que aduladores?
La pregunta no es ilegítima, cuando se sabe que Valentina Alazraki (quien realizó la entrevista para el canal mexicano Televisa-Univisión) y Philip Pullella (quien realizó la de la agencia Reuters) recibieron los títulos respectivamente de Dama y Caballero de la Orden de Pío IX de manos del mismo Francisco, el 13 de noviembre de 2021.
Y Silere non possumus concluye: "Está claro que nada sincero podrá surgir jamás de estas entrevistas, nada que refleje realmente un deseo de aclarar determinadas cuestiones".
Fuentes: Monday Vatican/Nuova Bussola Quotidiana/Silere non possumus/DICI n°423 - FSSPX.Actualités
Imagen: Korea.net / Korean Culture and Information Service (Photographer name), CC BY-SA 2.0, via Wikimedia Commons