El orgullo gay en una universidad jesuita

Fuente: FSSPX Actualidad

La Universidad Alberto Hurtado (Chile) celebró una ceremonia "religiosa" de "oración orgullosa", durante la cual se bendijo la bandera LGBT y se animó a participar en la marcha del Orgullo Gay, en el marco de una semana de actividades dedicadas a la "comunidad de la diversidad sexual".

La Universidad Alberto Hurtado, un centro universitario jesuita chileno, publicó un video en el que se muestra una celebración "religiosa" relacionada con el "mes del Orgullo Gay". Esta celebración no es un evento aislado, sino que forma parte de la "Semana del Orgullo" organizada por la universidad durante el mes de junio.

El miércoles 18 de junio de 2025 se celebró en esta universidad católica de Chile la primera "oración del orgullo", organizada por la "Dirección de Género, Diversidad e Igualdad" de la universidad. Para garantizar una mayor difusión, la ceremonia tuvo lugar en el patio del campus. El objetivo era "rezar por la comunidad de diversidad sexual en la universidad".

La oración fue dirigida por el jesuita Rodrigo García, responsable de la Pastoral de Diversidad Sexual de la universidad, ataviado con una estola multicolor ante la nueva bandera LGBT, que incluye el marrón y el negro, que representan las razas; el rosa, el azul cielo y el blanco, que representan a las personas transgénero; un triángulo amarillo y un círculo violeta, que representan la intersexualidad. La bandera fue bendecida durante la ceremonia.

El sacerdote explicó que se trataba de "un momento para dar gracias a la comunidad LGBT por lo que aporta a la universidad". También afirmó que lo que estaba haciendo era simplemente lo que quería el difunto papa Francisco: "Es un acto religioso. Es lo que dijo el papa Francisco. No he hecho nada que no se haya dicho o hecho. No es un acto subversivo ni revolucionario".

A este respecto, subrayó que el papa Francisco había repetido en varias ocasiones que "la Iglesia es un lugar para todos, todos, todos". Sin embargo, el jesuita se permitió modificar ligeramente la frase: "ahora decimos: todos, todas, todes".

También afirmó que la "oración del orgullo" se inscribe "en un momento mundial en el que se conmemora la lucha de las personas por los derechos a la diversidad sexual. Por eso nos sumamos al Mes del Orgullo, porque nuestra política respeta y promueve la diversidad". El jesuita subrayó que Dios "aprueba en cierto modo el orgullo" y que "Jesús se manifestará el sábado", en referencia a la Marcha del Orgullo que tendrá lugar este sábado 21 de junio.

La directora del departamento de género, diversidad e igualdad declaró que "en el marco del Mes del Orgullo, hemos invitado a estudiantes, funcionarios y académicos a reflexionar en torno a una oración que invita al respeto, a la inclusión, a la dignidad de todos y a comprender que la diversidad sexual merece un espacio de reconocimiento y es parte integrante de una comunidad que nos pertenece a todos".

También explicó que les parece importante que "sea precisamente una universidad católica la que explique a la sociedad que la religión y la diversidad pueden ir de la mano". Se recitó un Padre Nuestro y se elevaron plegarias a Dios por la inclusión y la importancia de la diversidad sexual. Hubo numerosas bendiciones de parejas del mismo sexo, de acuerdo con Fiducia supplicans. Pero, a juzgar por el video, la participación fue bastante escasa.

La Universidad Alberto Hurtado es la única universidad jesuita de Chile, un país que cuenta con una decena de universidades católicas. Fundada en 1997, su objetivo es "construir un proyecto académico de excelencia, sin ánimo de lucro, diverso, pluralista e inclusivo". En la sección dedicada a su identidad y misión, no se menciona a Dios en absoluto. En marzo, la universidad organizó el primer congreso chileno de estudios interdisciplinarios sobre diversidad sexual y género.

Que una universidad jesuita dedique el mes de junio a celebrar el Orgullo Gay, en contra de la moral de la Iglesia, cuando este mes es tradicionalmente el mes dedicado al Sagrado Corazón, una devoción estrechamente vinculada a la Compañía de Jesús, es algo que escapa a todo entendimiento.

A principios del siglo XX, la vigésimo tercera Congregación General de los jesuitas declaró que "la Compañía de Jesús acepta y recibe con espíritu rebosante de alegría y gratitud la dulce carga que nuestro Señor Jesucristo le ha confiado de practicar, promover y propagar la devoción a su divino Corazón".

Otros tiempos, otras costumbres, otras cargas...