El Papa habla sobre “Traditionis custodes”

Fuente: FSSPX Actualidad

El 30 de agosto pasado, el Papa Francisco concedió una entrevista a una emisora ​​católica española (COPE), transmitida el 1 de septiembre de 2021. En dicha entrevista, negó particularmente los rumores que circulan sobre su posible dimisión. Todo el contenido fue transcrito en la versión en español de Vatican News. Una de las preguntas hace referencia al reciente motu proprio “Traditionis custodes”.

Francisco, retomando la pregunta del periodista, primero reafirma su timidez y mansedumbre, declarando: "Yo no soy de dar golpes sobre la mesa, no me sale. Más bien soy tímido".

Luego traza la historia de Traditionis custodes. "La acción de San Juan Pablo II [que firmó el motu proprio Quattuor abhinc annos en 1984], y después Benedicto ya más claramente con Summorum Pontificum, hizo esta posibilidad de que se pudiera celebrar con el misal de Juan XXIII para aquellos que no se sentían bien con la liturgia actual, que tenían una cierta nostalgia..."

Y agrega: "Eso me pareció de las cosas pastorales más bellas y humanas de Benedicto XVI, que es un hombre de una humanidad exquisita. Y así empezó. Ese fue el motivo".

Luego, el Papa habló sobre la evaluación que tuvo lugar después de tres años: "Se hizo una evaluación y parecía que todo andaba bien. Y andaba bien. Y el año pasado vimos con los responsables del Culto y de la Doctrina de la Fe que convenía hacer otra evaluación a todos los obispos del mundo. Y se hizo".

Fue entonces cuando, según el Papa, constató "que una cosa hecha para ayudar pastoralmente a quienes han vivido una experiencia anterior, se fue transformando en ideología. O sea, una cosa pastoral a ideología. Entonces había que reaccionar con normas claras (...) que pusieran un límite a aquellos que no habían vivido esa experiencia".

En otras palabras, quienes descubrieron la Misa tradicional, pero no la conocían antes, se adhirieron a ella sin dejar de ver que se opone a la Misa Nueva y a la nueva teología, incluido el Concilio Vaticano II. Esto fue absolutamente intolerable. Por eso era necesario establecer límites.

"El límite es muy claro. Después de este motu proprio, un sacerdote que quiera celebrar no está en las condiciones de los otros, que era por nostalgia, por deseo, etc, y ahí sí tiene que pedir permiso a Roma. Una especie de permiso de bi-ritualismo, que solamente lo da Roma. [Como] un sacerdote que celebra en rito oriental y rito latino, es bi-ritual pero con permiso de Roma".

Pero, ¿por qué un sacerdote que quiere celebrar un rito que jamás ha sido prohibido, que no está prohibido, que no puede prohibirse, está en una situación particular? Eso es lo que no se dice.

Y no se puede decir, porque la ideología no está de parte de la Misa tradicional, sino del lado del Concilio Vaticano II y de la Misa Nueva. El Concilio no tiene autoridad infalible. Como se ha repetido hasta el cansancio, es pastoral, no definió ni condenó nada. Aunque Pablo VI quisiera convertirlo en un "superdogma". Basta recordar lo que escribió en una carta a Monseñor Lefebvre:

"Este Concilio no tiene menos autoridad e incluso es en ciertos aspectos más importante que el de Nicea". Ignoramos cuáles son estos aspectos que harían a Vaticano II tan importante, o incluso más que Nicea, el primer concilio ecuménico en la historia de la Iglesia que ¡proclamó la divinidad de Cristo, anatematizó la herejía de Arrio y fijó lo esencial del Credo!

Lo cierto es que el Papa Francisco, siguiendo los pasos de Pablo VI, quiere erradicar cualquier desviación de la ideología conciliar. Traditionis custodes es solo un paso más en este proceso de erradicación.

En el siguiente expediente hemos reunido los distintos estudios sobre el motu proprio Traditionis custodes: acceder al expediente