Estados Unidos: la teoría de género es una de las prioridades del nuevo presidente

Fuente: FSSPX Actualidad

Recién llegado a la Casa Blanca, el cuadragésimo sexto presidente de Estados Unidos manifestó sus prioridades. Entre las diecisiete ordenanzas firmadas el mismo día de su investidura, algunas relacionadas con el clima o la inmigración, hay una que da un lugar privilegiado a la teoría de género.

La nueva decoración del Despacho Oval revela un poco la personalidad y preferencias de su nuevo ocupante: los estantes han sido adornados con esculturas de Martin Luther King, Rosa Parks e incluso César Chávez. Además de una foto del Papa Francisco.

La serie de diecisiete decretos firmados el mismo día de su toma de posesión pretende mostrar el rumbo que el nuevo jefe del ejecutivo estadounidense quiere dar a la política de su país.

Una de estas órdenes ejecutivas firmadas por el católico Joe Biden está enfocada en la redefinición de la identidad sexual, a la luz de la teoría de género.

El decreto, titulado "Prevención y lucha contra la discriminación basada en la identidad de género o la orientación sexual", pretende establecer el rumbo que tomará la nueva administración de Estados Unidos.

Detrás de esto está el dogma progresista según el cual ser hombre o mujer es una cuestión de elección, y no un hecho de la naturaleza: "no se nace mujer, se llega a serlo", escribió Simone de Beauvoir en 1949, la máxima representante del existencialismo, musa lejana de la ideología de género.

Una decisión cargada de consecuencias y amenazas

Dicho decreto tiene por objeto interpretar la discriminación de género en la ley federal de tal forma que incluya también la orientación e identidad sexuales. Esta medida podría afectar los deportes en las escuelas secundarias, la privacidad de los cuartos de baño para personas del mismo sexo, las organizaciones religiosas que reciben subvenciones del gobierno o contratistas, y la posibilidad de que los empleados enfrenten represalias por expresar creencias religiosas "discriminatorias".

Ryan Anderson, miembro de la Heritage Foundation, explicó el alcance del nuevo decreto: "Los niños que se identifican como niñas deberán ser autorizados a participar en competiciones deportivas de niñas; los hombres que se identifican como mujeres deberán tener autorización a compartir los espacios reservados para las mujeres; los sistemas sanitarios deberán reembolsar las operaciones de cambio de sexo, y los médicos y hospitales deberán llevarlas a cabo".

La ordenanza es un mensaje fuerte y claro que el Ministerio de Justicia deberá aplicar: las escuelas que no cumplan con la nueva legislación corren el riesgo de perder su financiamiento.

"El decreto de Biden es el más sustancial y completo sobre la orientación sexual y la identidad de género jamás emitido por un presidente de los Estados Unidos", precisó Alphonso David, presidente del lobby Human Rights Campaign.

En términos más generales, la orden firmada por el 46° presidente de los Estados Unidos es solo el primer paso hacia una promesa de campaña mucho más ambiciosa de la dupla Biden-Harris: la enmienda de la Civil Rights Act -ley contra la segregación promulgada en 1964- en el nombre de una Ley de Igualdad, que equivaldría a consagrar definitivamente la teoría de género en el mármol de la ley.