Filipinas: el gobierno rechaza los mandatos judiciales de la ONU sobre el aborto

Fuente: FSSPX Actualidad

Jesus Crispin Remulla, ministro de justicia de Filipinas

Los líderes filipinos rechazaron nuevamente la presión ejercida por las Naciones Unidas en noviembre pasado para legalizar en su país el asesinato de niños no nacidos a través del aborto. Probablemente queriendo poner a prueba al nuevo gobierno filipino, la ONU pidió que se aplicaran las recomendaciones del organismo internacional.

El Manila Times informó que Filipinas rechazó rotundamente la recomendación del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas (HRC) de legalizar el matrimonio homosexual y permitir el aborto y el divorcio. Esta solicitud fue formulada por otros estados miembros de la ONU durante el Examen Periódico Universal (EPU) en noviembre en Ginebra.

El EPU es un mecanismo de revisión por pares que evalúa periódicamente la promoción y protección de los derechos humanos en los 193 estados miembros de las Naciones Unidas.

El secretario de Justicia, Jesús Crispin Remulla, dijo que las recomendaciones a favor del aborto hechas por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU la semana pasada en Ginebra eran "inaceptables".

Filipinas, un país predominantemente católico, protege a los bebés por nacer mediante la prohibición del aborto. Pero, al igual que otros países pro-vida, sus líderes están bajo una intensa presión de las potencias mundiales para legalizar el aborto. 

Es un acto contrario a la identidad nacional

"Es una cuestión de política, lo aceptemos o no, y creo que sabemos que como país no estamos preparados para eso", declaró Remulla en una conferencia de prensa el lunes 21 de noviembre de 2022.

"Culturalmente, nuestros valores pueden entrar en conflicto con muchos valores que ellos [los países occidentales] quieren imponernos. No estamos preparados para esto, culturalmente no estamos preparados para esto. Esta es nuestra posición en este momento", agregó.

"En efecto, creo que somos el único país, junto con el Vaticano, que no reconoce el divorcio", dijo Remulla.

El subsecretario de Justicia, Raúl Vásquez, dijo que la delegación filipina rechazó rotundamente las recomendaciones "debido a la identidad nacional, nuestras creencias religiosas, nuestras tradiciones culturales y la soberanía de Filipinas, que deben protegerse y mantenerse en todo momento".

Vásquez también ha criticado a los líderes pro-aborto que atacan a su país porque sus leyes protegen a los bebés en el vientre de su madre.

"Estos son los países que suelen atacar a Filipinas. Son los países ricos de Europa que están muy apegados a los derechos individuales y no tienen un concepto de los derechos comunitarios. Pero creo que nos defendimos muy bien", dijo Vásquez, según el Manila Times.

Los líderes pro-vida dicen que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, también ha presionado a los países pro-vida para que legalicen el aborto.

Cabe recordar que el aborto es la primera causa de muerte en el mundo. Cada año, entre 42 y 73 millones de bebés por nacer son abortados en todo el mundo, colocando la matanza de inocentes en el primer lugar de las muertes anuales.