Fisura en el Sínodo de la Juventud: un obispo protesta contra el uso del término LGBT

El documento preparatorio del Sínodo (Instrumentum laboris) ha cruzado el Rubicón al emplear por primera vez el término LGBT. Esto ha ocasionado reacciones enérgicas en los prelados que se adhieren a la moral tradicional de la Iglesia.

"Las iniciales LGBT o términos similares no deben utilizarse en la Iglesia", declaró Monseñor Chaput, quien insistió: "No existen los LGBT católicos, los católicos transgénero ni los católicos heterosexuales: eso es tanto como decir que nuestras tendencias sexuales definen lo que somos; como si estas denominaciones se refirieran a distintas comunidades de igual valor dentro de la verdadera comunidad eclesial, el cuerpo de Jesucristo."

"Esto nunca ha sido cierto en la vida de la Iglesia y tampoco lo es ahora: en consecuencia, los términos LGBT y elementos de lenguaje similares no deben utilizarse en los documentos oficiales de la Iglesia, porque su uso sugiere que se trata de grupos reales y autónomos", concluyó el prelado.

Es muy probable que al Cardenal Lorenzo Baldissero, secretario del Sínodo y ponente del Instrumentum laboris, que aprobó la terminología LGBT, le haya parecido muy poco agradable esta piedra lanzada en su jardín.