India: el gobierno niega los ataques contra los cristianos

Fuente: FSSPX Actualidad

Salvadore Lobo y Peter Machado

Una petición firmada por monseñor Peter Machado, de Bangalore, junto con el Foro de Solidaridad Nacional y la Fraternidad Evangélica de la India, se presentó ante la Corte Suprema para denunciar los ataques contra cristianos. Se han registrado cerca de 500 incidentes cometidos en 2021 y 2022, con las pruebas para respaldar la información.

La Corte Suprema pidió al gobierno central de la India que investigara la situación. El informe que acompaña a esta petición enumera demoliciones de iglesias, asesinatos, conversiones forzadas, violencia física, arrestos de religiosos, daños a estatuas, iglesias y propiedades, así como la interrupción de reuniones religiosas y misas.

Incidentes infundados o deliberadamente exagerados

En respuesta, el 13 de abril de 2023, el gobierno indio refutó la veracidad del informe que enumera los ataques contra cristianos. Según las autoridades indias, menos de un tercio de los 495 ataques y actos de violencia perpetrados entre 2021 y 2022 contra la minoría cristiana en varios estados de la India serían reales, informó Eglises d'Asie, el 10 de mayo.

"De 232 incidentes registrados por los gobiernos estatales, 73 de ellos fueron resueltos amigablemente, con el acuerdo de ambas partes. Estos 73 incidentes estaban relacionados con disputas de tierras, prácticas supersticiosas, violaciones de las reglas de Covid-19 y otros problemas", señaló el gobierno.

"Se presentaron denuncias en otros 155 casos" en las comisarías locales de los estados de Uttar Pradesh, Chhattisgarh, Madhya Pradesh, Karnataka, Haryana, Bihar, Jharkhand y Odisha. El gobierno federal denuncia una exageración de los ataques enumerados en el informe. "Muchos de los incidentes enumerados como persecución de cristianos son falsos o tergiversados.

"Un gran número de disputas han sido teñidas con tintes religiosos. La verificación de hechos y denuncias revela que incluso se han presentado rencillas familiares y disputas territoriales como ataques comunitarios", argumenta el gobierno. Se dice que los incidentes son "infundados y en su mayoría falsos o deliberadamente exagerados y sin fundamento". Rechazando la veracidad de los hechos expuestos, las autoridades indias piden que se retire la petición.

También niegan la falta de intervención policial que, según los cargos, habría alimentado un clima de intolerancia. "Por el contrario, la verificación de los reportes oficiales de los gobiernos regionales revela que la policía actuó rápidamente en muchos casos y llevó a cabo las investigaciones necesarias, de acuerdo con la ley", argumentan, mientras recuerdan que la Constitución garantiza la ley de libertad religiosa en India.

El tribunal tomó nota del informe presentado por el gobierno federal y dio a los peticionarios tres semanas para responder.

Los ataques contra cristianos se generalizaron a partir de 2021

En su respuesta del 8 de mayo, los tres peticionarios señalaron que el contrainforme del gobierno federal reveló que grupos políticos vinculados al gobierno están implicados en los crímenes comunitarios, porque ese informe menciona inadvertidamente los nombres de organizaciones hindutva (hindú), cuya ideología – apoyada por el Partido Bharatiya Janata (BJP) – busca proteger el patrimonio indio contra las minorías religiosas procedentes del extranjero.

En consecuencia, los peticionarios expresan su falta de confianza en el gobierno y exigen que un juez retirado de la Corte Suprema encabece una agencia de vigilancia, con el mandato de nombrar a los policías que puedan supervisar efectivamente la investigación.

Su respuesta también señala que los ataques contra cristianos se han generalizado en varios estados a partir de 2021. Estos ataques coincidieron con la adopción o modificación de leyes anticonversión por parte de Uttar Pradesh, Madhya Pradesh, Karnataka y Haryana.

Los peticionarios también señalan que se reportaron 505 casos de agresiones en 2021, 598 en 2022 y 123 en enero y febrero de este año. Impugnando al gobierno, afirman que el aparato estatal no ha tomado medidas inmediatas y enérgicas contra los grupos que provocan una violencia generalizada, como ataques al culto cristiano e interrupción de las reuniones de oración.

En la mayoría de los casos, los agresores van acompañados de la policía local, lo que les da confianza para recurrir a la violencia. Los peticionarios afirman que el 90% de los casos siguen un modus operandi similar, y que estos ataques son parte de una estrategia planificada.

Finalmente, "si bien los miembros de la comunidad [cristiana] y los sacerdotes se ven obligados a pasar largas horas en prisión sin posibilidad de fianza, no hay un solo caso en el que los atacantes hayan tenido que pasar tiempo detenidos", señalan los peticionarios.

Un gobierno pro-hindú anticristiano

En la gran mayoría de los 29 estados de la Unión India, los militantes del partido nacionalista hindú Bharatiya Janata Party (BJP) tienen autoridad, y su programa político es abiertamente discriminatorio contra las minorías cristiana y musulmana, en nombre de la supremacía hindú.

El BJP del primer ministro indio, Narendra Modi, en el poder desde 2014, se comprometió a implementar un programa político pro-hindú, imponiendo su ideología de la Hindutva donde solo la cultura hindú define a la nación india y su identidad.

Los católicos indios administran más de 25,000 escuelas y universidades en toda la India, así como 85,000 camas de hospital en aldeas remotas. Más de 5 millones de personas pobres y marginadas son atendidas cada año por 5,000 organizaciones católicas registradas. Los cristianos representan el 2.3% de los 1,400 millones de habitantes de la India, y son perseguidos principalmente por grupos nacionalistas hindúes asociados con el partido gobernante pro-hindú Bharatiya Janata.

Monseñor Salvadore Lobo, obispo emérito de Baruipur, Bengala Occidental, explicó a Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN) que las leyes anticonversión, aplicables en algunos estados, a menudo se usan indebidamente para encubrir la discriminación anticristiana. "Algunos partidos acusan a la Iglesia de seducción, pero en los últimos 30 años el porcentaje de fieles católicos no ha aumentado en la India, ¡así que no es una cuestión de seducción!"

El obispo emérito de Baruipur destaca la hipocresía de los hindúes radicales que acusan a los misioneros de convertir a las personas a cambio de comida o dinero, despreciando las obras de la Iglesia, como hospitales, escuelas y organizaciones de ayuda que benefician a miles de personas.

"Visité un hospital católico en Bangalore que atiende diariamente a 3,000 pacientes ambulatorios. La mayoría no son cristianos, pero nuestros hospitales son muy valorados porque tratan a los pacientes como seres humanos. Es por eso que algunos nos acusan de seducción".

"El principio del BJP es dividir y vencer", declaró monseñor Lobo. Aunque el cristianismo ha estado presente en la India desde hace casi dos mil años, los hindúes radicales a menudo los describen como no indios. Usan esta retórica para movilizar su base electoral y ganar las elecciones.

"Aunque a veces hay persecuciones contra nosotros, eso no significa el fin de la Iglesia. (…) Creemos que la sangre de los mártires hace crecer a la Iglesia. Necesitamos ser pacientes y hacer de nuestra vida un testimonio visible, incluso cuando sufrimos".