Irak: los cristianos podrían boicotear las elecciones
Lavatorio de pies del Jueves Santo por el patriarca de los caldeos de Irak, Louis Raphaël Sako
En una declaración conjunta firmada el 30 de marzo de 2023, los distintos líderes religiosos cristianos que integran el Consejo de Nínive anunciaron un boicot a las próximas elecciones en caso de que no se garantice la representación de los cristianos y la salvaguardia de sus intereses.
El fuego ha estado ardiendo desde hace varios días. Desde el 27 de marzo de 2023, más precisamente, día en que el parlamento iraquí aprobó una serie de enmiendas al código electoral vigente, con el fin de establecer un sistema de votación proporcional.
El nuevo sistema privilegiará a las grandes formaciones políticas -kurdos y chiítas- en detrimento de los pequeños candidatos independientes, y los escaños tradicionalmente atribuidos a las minorías étnicas y religiosas -los cristianos cuentan con cinco escaños en el parlamento– serán asignados por los principales partidos ganadores.
Por tanto, según las nuevas enmiendas introducidas, los cinco escaños reservados a los cristianos se repartirán en dos megacircunscripciones distintas. Los dos escaños cristianos de Erbil y Dohuk se elegirán en la circunscripción electoral correspondiente a la región del Kurdistán iraquí, mientras que los tres escaños repartidos entre Bagdad, Kirkuk y Nínive se repartirán dentro de un amplio colegio electoral renovado.
En otras palabras, según las reglas que rigen la nueva distribución de los escaños del componente cristiano, se tomará en cuenta el voto de los no cristianos, es decir, los futuros diputados cristianos serán satélites de las facciones kurdas y de las milicias pro-iraníes en el parlamento.
En este contexto, al Consejo de Nínive, que reúne a los obispos católicos y ortodoxos presentes en la llanura de Nínive, le preocupa que "los candidatos ya no representen realmente a las comunidades cristianas de Irak, y no garanticen sus intereses en el futuro".
Los obispos católicos, apoyados por los "ortodoxos", proponen a las autoridades establecer un registro de electores cristianos con derecho a voto para asignar los cinco escaños: "El establecimiento de tal registro estaría en plena armonía con la Constitución iraquí y las decisiones de la Suprema Corte respecto a los procedimientos electorales", explica el Consejo de Nínive.
Los prelados cristianos advierten: "Si no se escuchan las demandas de nuestras comunidades, tendremos dos alternativas. O pediremos la eliminación de nuestros cinco escaños para evitar que sean ocupadas por diputados que no nos representan, o llegaremos al boicot electoral".
La pelota está ahora en la cancha del ejecutivo iraquí. Desde el trauma causado por la sangrienta ocupación de una parte del país por la organización Estado Islámico, los sunníes han mantenido un perfil bajo, y se resignan a que Irak se haya convertido en un país chiíta, destinado a mantener relaciones más o menos estrechas con Irán. En cuanto a los kurdos, parecen haber obtenido lo que querían: a saber, garantías constitucionales.
Entre estas dos grandes facciones rivales, los cristianos intentan sobrevivir, no sin dificultad, y luchando contra cualquier instrumentalización política.
Fuente: Fides – FSSPX.Actualités
Imagen: Banque d’images Alamy