Irak: Los cristianos ya no quieren regresar a Mosul
Durante la misa en la iglesia de San Juan de Qaraqosh, Irak.
Las fuerzas iraquíes están a punto de recuperar la ciudad de Mosul, al norte de Irak. Ocupada por el Estado Islámico (EI) desde octubre del 2014, la segunda ciudad más grande de Irak (con 1.5 millones de habitantes) fue alguna vez el hogar de la comunidad cristiana más grande del país.
Pero debido al trato tan salvaje a la que estaba sometida, esta comunidad huyó masivamente, dejando todas sus pertenencias en manos de los musulmanes. Esta situación llevó al Padre Emmanuel, pastor de un campo de refugiados en Erbil, en el Kurdistán iraquí, a decir "para nosotros los cristianos, Mosul se ha terminado. No regresaremos." A pesar de su presencia de varios siglos, los cristianos ya no "pertenecen ahí" y liberar la ciudad "ya no cambia en nada la situación". Cuando fue cuestionado por un enviado especial de la agencia de noticias cath.ch a Irak, el 1 de mayo del 2017, el Padre Emmanuel se lamentó diciendo: "algo se rompió de forma irreparable entre nosotros y nuestros compatriotas musulmanes... Queremos quedarnos en el país. Pero si la mayoría musulmana ya no nos quiere, ¿qué podemos hacer? Los musulmanes no conocen el amor al prójimo, especialmente cuando se trata de otra religión. Es muy improbable que acepten regresar las propiedades que les han robado a los cristianos."
El sacerdote salió huyendo de Mosul precipitadamente junto con 500 familias, el 10 de junio del 2014. Actualmente, vive con 1,500 familias cristianas, aproximadamente unas 5,000 personas, en un campo construido en medio de un terreno extenso e indefinido. Tal y como reporta el corresponsal de cath.ch, estas familias, que en algún tiempo fueron "propietarios de tierras, mercaderes o empresarios", se han quedado sin nada. Y "sin un plan, sin una organización, no pueden pensar en regresar a casa, aun cuando los terroristas del Daesh fueran derrotados." Las autoridades eclesiásticas tratan de animarlos a regresar, pero sin ofrecerles ninguna garantía, "nadie quiere arriesgarse."
Fuentes: cath.ch/afp / FSSPX.News - 5/26/17