La comunidad de Sant'Egidio a la sombra del Papa Francisco
Andrea Riccardi
El 7 de mayo de 2024, Sandro Magister presentó un estudio muy documentado sobre el movimiento de Sant'Egidio que cuenta con todos los favores del Papa. Para el vaticanista: "Francisco parece favorecer desproporcionadamente a la Comunidad de Sant’Egidio. Y esta última le devuelve el favor ocupando cada vez más espacio en las altas esferas de la Iglesia".
Hasta el punto de que es imposible ignorar la influencia de los miembros de Sant'Egidio si realmente se quiere entender el pontificado actual. El vaticanista demuestra así el discreto papel que desempeña Sant'Egidio con el Papa:
"La Comunidad ha estado activa a nivel internacional desde hace años. Uno de sus miembros más destacados, Mario Giro, fue viceministro de Asuntos Exteriores de Italia en dos gobiernos en el pasado y es presidente de Demos, Democrazia Solidale, un pequeño grupo cuyo secretario es Paolo Ciani, también perteneciente a Sant'Egidio, que ocupa un asiento en el parlamento en las filas del Partido Demócrata".
Más conocido es el embajador personal de Francisco en Ucrania, el cardenal Matteo Zuppi, arzobispo de Bolonia y presidente de la Conferencia Episcopal de Italia. Sandro Magister escribe sobre él: “Miembro destacado de Sant'Egidio desde los primeros tiempos, Zuppi es el hombre que el Papa Francisco utiliza como emisario en el frente de la guerra en Ucrania.
"Hasta ahora sin resultados, ni siquiera a nivel humanitario, como el esperado retorno de miles de niños deportados a Rusia. Y esto a pesar de las relaciones amistosas mantenidas desde hace años con el Patriarca ortodoxo de Moscú, cultivadas sobre todo por el vicepresidente de la Comunidad, Adriano Roccucci, profesor de historia contemporánea en la Universidad de Roma y especialista en Rusia".
Y explica: "Lo que une el activismo geopolítico de Sant'Egidio al del Papa Francisco es una visión común, apoyada por Mario Giro en los artículos que escribe en el diario Domani, que ve en el 'Global South' de África, Asia y América Latina la alternativa a esa dominación de Estados Unidos y Europa que el argentino Jorge Mario Bergoglio siempre ha detestado".
Sin embargo, señala el vaticanista, esta desconfianza hacia Estados Unidos y Europa "no impide que la Comunidad halague y elogie a las más altas autoridades políticas de Occidente, desde la secretaria de estado de la presidencia Clinton, Madeleine Albright, que los llamó “gente maravillosa”, a Angela Merkel y Emmanuel Macron.
"Tampoco impide que reúna en los grandiosos encuentros interreligiosos que organiza (cada año según el llamado “espíritu de Asís”) tanto a los líderes musulmanes más destacados como a los rabinos judíos e incluso, de vez en cuando, al propio Papa Francisco".
Un signo muy visible de “la predilección que Francisco muestra por Sant’Egidio” se encuentra, señala Sandro Magister, “en el creciente número de nombramientos episcopales en sus filas.
"A Monseñor Zuppi, Monseñor Vincenzo Paglia y el obispo de Frosinone, Veroli y Ferentino, Monseñor Ambrogio Spreafico, ordenado por Benedicto XVI, se añadió en 2021 Monseñor Giuseppe Mazzafaro, obispo de las diócesis de Cerreto Sannita, Telese y Sant'Agata de'Goti, y en 2023 Monseñor Giorgio Ferretti, arzobispo de Foggia y Bovino".
Otro dato muestra el favor excepcional del que disfruta Sant'Egidio en el Vaticano: "El pasado mes de julio, Francisco confió a la Comunidad las llaves de la flamante Comisión para los nuevos mártires (que ecuménicamente debe ocuparse de los mártires de todas las denominaciones cristianas).
"Andrea Riccardi, el fundador de Sant'Egidio, es el vicepresidente, y el secretario es Marco Gnavi, párroco de la basílica romana de Santa María en Trastevere, con los miembros Angelo Romano y Gianni La Bella, otro profesor universitario de historia contemporánea, profesión típica de los altos cargos de la Comunidad".
Y añade: “No es, por tanto, sorprendente que Francisco, que fijó la norma de que ningún presidente de un movimiento católico puede permanecer en el cargo más de diez años, tolere con indiferencia que Marco Impagliazzo, profesor de historia contemporánea en la Universidad de Roma Tres, continúa presidiendo la Comunidad de Sant'Egidio ininterrumpidamente desde 2003”.
Sin embargo, advierte Sandro Magister, no hay que malinterpretar la influencia real del presidente Impagliazzo: "Él no es el verdadero número uno de la Comunidad, como tampoco lo es el cardenal Zuppi, aunque muchos lo consideran el primero en la lista de candidatos al papado, en particular gracias a su manera de decir sin decir, de entreabrir las puertas sin abrirlas del todo y de esquivar siempre las cuestiones más divisivas".
No, recuerda el vaticanista: “El cardenal George Pell, con su reconocida competencia en esta materia, solía decir: 'Cuidado, porque si Zuppi es elegido para el cónclave, el verdadero Papa será Andrea Riccardi'. Es decir el omnipotente fundador de la Comunidad, célebre especialista en historia de la Iglesia.
"Ex ministro de cooperación internacional, premio Carlomagno en 2009 y candidato en 2022 a la presidencia de la república italiana, es el único que tiene el poder de mover todos los hilos de esta formidable máquina llamada Sant' Egidio". – La pregunta es si estos hilos también llegan a la Casa Santa Marta.
Fuente: Settimo Cielo – trad. à partir de diakonos/DICI n°446 – FSSPX.Actualités
Imagen: Euku:⇄, CC BY-SA 3.0, via Wikimedia Commons