Los médicos holandeses ya pueden practicar la eutanasia sin previo aviso

En los Países Bajos, los médicos ahora pueden introducir un sedante sin el conocimiento de sus pacientes y sin su consentimiento antes de aplicarles la eutanasia, si existe el riesgo de que el paciente se "inquiete" al momento de llevar a cabo la acción que terminará con su vida.
¿Acaso la máscara de la "eutanasia amable, que permite terminar con la propia vida dignamente" finalmente está cayendo? Este podría ser el caso en los Países Bajos, como informó The Guardian en su edición del 20 de noviembre de 2020.
En efecto, en el país de los tulipanes, el protocolo para los pacientes que sufren de demencia o alguna condición similar acaba de cambiar significativamente. A partir de ahora, "ya no es necesario que el médico acuerde con el paciente cuándo o cómo se administrará la eutanasia".
En otras palabras, se han dado los primeros pasos hacia la ejecución sumaria, legal y en toda regla.
Esta terrible decisión es resultado de un fallo del Tribunal Supremo de los Países Bajos el pasado mes de abril, que decidió absolver de toda sospecha a un médico que sedó a su paciente para aplicarle la eutanasia sin su conocimiento.
Los hechos se remontan a 2016. El médico, llamado Marinou Arends, fue condenado por asesinato después de haber aplicado la eutanasia a una paciente con enfermedad de Alzheimer avanzada.
Esta última habría indicado inicialmente su deseo de que le administraran la eutanasia, en caso de ser trasladada a una casa de retiro. Posteriormente, la paciente se retractó, indicando en varias ocasiones que ya no quería que le practicaran la eutanasia.
A pesar de este cambio radical, Marinou Arends simplemente decidió poner fin a la vida de su paciente, sin que ella lo supiera, después de haberle administrado un sedante mezclado con su café.
Aquí es donde la historia se vuelve todavía peor: el sedante no tuvo el efecto deseado y la pobre mujer trató de apartar su brazo de la aguja fatal; y solo con la ayuda del yerno de la paciente el médico pudo llevar a cabo el homicidio.
En este fallo de graves consecuencias, por el que sus miembros tendrán que responder ante la Historia, la Corte Suprema anuló la condena por asesinato y absolvió completamente a Arends.
Jacob Kohnstamm, presidente de la Comisión de Revisión de la Eutanasia de Holanda, celebró con beneplácito el nuevo protocolo implementado en noviembre de 2020: "al menos, los médicos tendrán menos razones para temer a la justicia". Quizás a la de los hombres. Pero ¿y la justicia infalible del Creador?