Monseñor Paglia acepta la legitimidad de la ley italiana sobre el aborto

Durante la transmisión, la presentadora Giorgia Rombolà preguntó a monseñor Paglia, presidente de la Academia Pontificia para la Vida desde el 17 de agosto de 2016, después de haber sido presidente del Pontificio Consejo para la Familia, su opinión sobre el aborto, reintroducido en el debate político a medida que se acercan las elecciones.

La respuesta fue clara: "Creo que la Ley 194 es ahora un pilar de nuestra vida social". La "Ley 194" es la ley del aborto en Italia, una ley que ha permitido el asesinato de más de 6 millones de niños desde que entró en vigor.

Algo vacilante e incrédula ante tal respuesta, la presentadora insistió y preguntó si se refería a la Ley 194. El prelado insistió: "¡Sí, absolutamente, absolutamente! Hay una parte que no se aborda, el derecho a la maternidad, a ver crecer a nuestro país ante el drama del desequilibrio generacional".

La reacción de una asociación pro-vida

A raíz de estas declaraciones, la asociación italiana Pro Vida & Famiglia publicó un comunicado firmado por su portavoz, Jacopo Coghe, en el que expresa su "asombro" por las declaraciones del arzobispo.

"La intención justa de promover un debate abierto, laico y compartido sobre el aborto y la natalidad, fomentando la aplicación de la Ley 194 en condiciones de igualdad con el contexto de la prevención y protección social de la maternidad, no puede negar la inequidad intrínseca de la Ley 194.

Por eso nos sorprendieron las palabras del presidente de la Academia Pontificia para la Vida, monseñor Vincenzo Paglia, quien ayer declaró, en directo en la RAI, que la Ley 194 sobre el aborto es "un pilar de nuestra vida social". No entendemos cómo una ley que elimina vidas humanas indefensas e inocentes puede ser un "pilar" de la sociedad".

La réplica de la Pontificia Academia para la Vida

El 29 de agosto, el portavoz de la Academia protestó por esta reacción. Explicó que monseñor Paglia solo estaba señalando "que es prácticamente imposible derogar la Ley 194 como elemento ya estructural de la legislación en la materia".

Sin embargo, esta reacción subraya lo acertado de la respuesta de la asociación pro-vida, y solo hunde un poco más al prelado que quiere defender.

En efecto, según Santo Tomás de Aquino, la teología enseña que una mala ley no es una ley. Porque una verdadera ley debe hacerse para el bien común. Sin embargo, un delito como el aborto es contrario al bien común. Por eso podemos oponernos a tal ley hasta que sea derogada. Es imposible que algo que no es una ley pueda ser un "elemento estructural de la legislación".

Tal afirmación reconoce la legitimidad de tal ley. Y no tiene sentido recurrir a subterfugios: según el portavoz, el término "pilar de la sociedad" no es un juicio de valor sobre la ley. Reconocer la legitimidad, es aprobar esta ley como buena, porque solo una buena ley puede ser considerada una verdadera ley.

Esta declaración y el intercambio resultante muestran hasta qué punto la Academia Pontificia para la Vida se ha extraviado y se ha desviado de la doctrina católica en un tema tan esencial como el aborto.