Mozambique: los yihadistas asesinan a una religiosa

La religiosa italiana murió en un ataque a una misión católica en el noreste de Mozambique, que ha estado plagado de violencia yihadista desde hace casi cinco años. La hermana fue asesinada por "terroristas" que atacaron la misión de Chipene, en la diócesis de Nacala, una ciudad portuaria, informaron las Misioneras Combonianas en un comunicado.

Según la información de la agencia de noticias Fides, los atacantes destruyeron las principales estructuras de esta misión ubicada en una zona forestal y dedicada a la educación: la iglesia, el hospital y la escuela primaria y secundaria. Sor María recibió un disparo en la cabeza cuando intentaba llegar al dormitorio donde se encontraban algunas de las estudiantes. Un jefe tradicional también perdió la vida.

Dos misioneros de la diócesis de Concordia-Pordenone pudieron escapar del ataque. Loris Vignandel, de 45 años, originario de Corva y expárroco de Chions (Pordenone), y el Padre Lorenzo Barro, exrector del seminario diocesano de la localidad de Destra Tagliamento.

Sor Ángeles López, de Murcia, y otra religiosa italiana lograron escapar del ataque y esconderse en el bosque, junto con un grupo de niñas, según informó la secretaria general de las Misioneras Combonianas en Italia, Enza Carini.

"Las otras hermanas están tratando de llegar a Chipene para recuperar su cuerpo y enterrarlo en otra misión", declaró monseñor Inacio Saure, arzobispo de Nampula, de la cual Nacala es una diócesis sufragánea. En cuanto a los autores del atentado, monseñor Suare dijo "no estamos seguros de que fueran terroristas islámicos, aunque es muy probable que así sea".

Los católicos cada vez más en el punto de mira de los yihadistas

El grupo Estado Islámico se atribuyó la responsabilidad del ataque el miércoles afirmando en un comunicado que sus combatientes "mataron a cuatro cristianos, incluida una religiosa italiana. Los yihadistas han realizado recientemente incursiones más al sur, mientras se despliega una misión militar regional en Cabo Delgado.

Según la prensa italiana, Sor Maria De Coppi había trabajado en Mozambique desde la década de 1960. La misión albergaba a personas que habían huido de sus hogares a causa de los ataques yihadistas en ese país.

El ataque a la misión de Chipene no es el primero perpetrado por estos extremistas armados contra iglesias católicas en Mozambique. En abril, y luego en octubre de 2020, la misión de Nangololo, la segunda misión más antigua de la diócesis de Pemba (distrito de Muidumbe, provincia de Cabo Delgado) fue completamente destruida.

La misión de San Pedro de Lurio, en Chipene, fue fundada en 1963 por la difunta Sor María De Coppi. La religiosa, nacida en 1939 y originaria de Santa Lucia di Piave (diócesis de Vittorio Veneto, en el norte de Italia), llegó a suelo mozambiqueño tras un largo viaje en barco.

Desde el 1 de enero de 2022 han sido asesinados 13 sacerdotes y 2 religiosas (1 en Asia, 8 en África y 6 en Asia), según un recuento hecho por la redacción de la revista Sismógrafo.

Más de 4,000 muertos en Mozambique desde 2017

La violencia en Mozambique ha cobrado la vida de más de 4,000 personas desde octubre de 2017, según la ONG Acled, que se encarga de reunir datos en zonas de conflicto, y ha provocado la huida de 820,000 personas. La región de Nampula, donde se encuentra la misión, se había librado hasta ahora de los ataques yihadistas, cuyo objetivo principal era la vecina provincia de Cabo Delgado, rica en gas natural.

"Es un área que se consideraba relativamente segura hasta ahora", dijo a la AFP Piers Pigou, consultor para el sur de África en el grupo de expertos Crisis Group.

El presidente de Mozambique, Filipe Nyusi, declaró el miércoles que los yihadistas se habían dividido en varias células pequeñas de hasta 15 militantes para evitar ser detectados. "En los últimos días, se han estado moviendo por la provincia de Nampula", explicó Filipe Nyusi durante un evento organizado en la ciudad sureña de Xai-Xai, que se transmitió en línea.

Desde el 27 de agosto, seis personas han sido decapitadas, tres secuestradas y decenas de casas quemadas en ataques a Nampula y otras localidades, añadió el jefe de Estado.