Padres sinodales a imagen de Francisco (3)

Fuente: FSSPX Actualidad

Publicada el 7 de julio de 2023, la lista de participantes para la XVI Asamblea General del Sínodo Ordinario de los Obispos –o Sínodo sobre la Sinodalidad– fue comunicada a la prensa por el Vaticano. Dicha lista resulta particularmente esclarecedora sobre las intenciones del Papa Francisco, y puede hacer creer que las decisiones del Sínodo han sido tomadas con antelación. Sin embargo, es necesario elevarse por encima de estas maniobras terrenales. 

Las causas segundas están sujetas a la Providencia, incluso en el Vaticano

En esta situación particularmente alarmante, es interesante leer el análisis del exarzobispo de La Plata (Argentina), Monseñor Héctor Aguer, sustituido por Monseñor Fernández, protegido de Francisco, quien acaba de ser designado como prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, antes de recibir la condecoración cardenalicia el próximo mes de septiembre.

Este análisis data del 4 de julio, y es retomado en el blog de Aldo Maria Valli el 8 de julio. El prelado argentino comenta el Documento de Trabajo del Sínodo del 20 de junio, pero esclarece anticipadamente la elección de los miembros de este Sínodo, hecha pública el 7 de julio: "Estupefacción. Esta es la palabra que surge de mis labios después de leer las cincuenta páginas del Instrumentum laboris para el Sínodo previsto 'democráticamente' desde 2021.

"La Prensa, de Buenos Aires, publicó el encabezado: 'El Vaticano ha dado a conocer la espinosa hoja de ruta para el próximo sínodo'. El documento subraya la 'profunda necesidad de emular a nuestro Maestro y Señor en la capacidad de vivir una aparente paradoja: proclamar agresivamente su enseñanza auténtica, y al mismo tiempo, servir de testimonio para la inclusión y la aceptación radical".

"¿A qué imitación agresiva y paradójica de Cristo se refieren? Se trata de un enfoque inusual: la Iglesia sinodal formula una glosa progresista del Evangelio. El Instrumentum laboris ilustra cómo la agenda globalista para 2030 puede ser recibida a nivel eclesial. Es admirable cómo la monarquía papal obliga a la 'democracia sinodal' a decir lo que la primera quiere que esta 'democracia' diga. 

"Es como tirar una piedra y esconder la mano. El itinerario de la futura asamblea, que está en preparación desde hace dos años, hace hablar y votar a la 'multitud', en particular, y de una manera nueva, a las mujeres. A esto me refiero con el conocido ejemplo de la piedra lanzada. Cuando el proyecto de esta otra Iglesia esté terminado, el soberano pontífice, ante las críticas que no faltarán, podrá decir: "¡No fui yo quien lo hizo!"

"Retomando el camino recorrido desde 2021, el documento aborda la cuestión de una nueva eclesiología: la sinodalidad. Permítanme una digresión: "sínodo" significa "caminar con" (del griego syn y odos) ¡pero no dice hacia dónde! El destino puede ser, por tanto, la nueva Iglesia progresista, heterogénea en relación con la gran Tradición eclesial. ¡Y vamos todos juntos!"

Además, Monseñor Aguer señala: "El texto del Documento de Trabajo señala que 'algunas personas no se sienten aceptadas en la Iglesia, como los divorciados vueltos a casar, las personas que viven en matrimonios definidos como irregulares, o las personas LGBTQ+, y existen formas de discriminación racial, étnica, de clase o de casta que hacen que algunos se sientan menos importantes o menos bienvenidos en la comunidad".

"El objetivo de una 'superación' se formula en estos términos: '¿Cómo podemos crear espacios donde quienes se sienten heridos por la Iglesia y rechazados por la comunidad puedan sentirse reconocidos, no juzgados y libres de hacer preguntas? ¿Y cuáles son las medidas concretas a tomar para llegar a las personas que se sienten excluidas de la Iglesia debido a su afectividad y sexualidad?'

"Estas son las preguntas que se hará la asamblea sinodal. Me arriesgo a una interpretación: la verdad objetiva y el reconocimiento de los preceptos por los que se se juzga la virtud y el pecado ya no importan. Lo que importa ahora es el sentimiento de quienes se consideran excluidos; es su sentimiento, no el estado objetivo en el que se encuentran".

El arzobispo argentino denuncia la protestantización de la Iglesia, citando al filósofo luterano Soren Kierkegaard: "Por curioso que parezca, la Iglesia católica comienza tardíamente a seguir el camino abierto por la Reforma Protestante, cuando el protestantismo hace tiempo que fue devorado por el mundo. […]

"Soren Kierkegaard, escribió en su Journal en 1848: "Cuando se habla de reorganizar la Iglesia, vemos claramente cuán poco cristianismo hay en ella" (IX A 264). En la misma página, habla de la 'desafortunada ilusión del cristianismo, que sustituye el hecho de ser cristiano por el hecho de ser humano".

"Esta es la fatal ilusión que engaña hoy a la Iglesia católica. El programa del Sínodo, como el del Camino sinodal alemán, concibe otra Iglesia, heterogénea en relación a la gran y unánime Tradición".

Citando la promesa de Cristo: "Yo estaré con ustedes siempre hasta el fin del mundo" (Mt 28, 20), Monseñor Aguer recuerda que el mal es permitido por Dios, porque de él obtendrá mayores bienes, y que las causas de este mal, por muy poderosos que parezcan, son solo causas segundas, sujetas a la omnipotencia de Dios, única Causa Primera.

Así lo expresa: "En el orden misterioso de la divina Providencia se sitúan las causas segundas, que esta última ordena según designios inescrutables. En la Providencia se manifiestan la justicia y la misericordia. La Providencia incluye la dialéctica de las causas segundas y, por tanto, se puede decir que permite el mal.

"Los propósitos de los autores del Sínodo son aquellas causas segundas, libres de hacer el mal. ¿Cómo me atrevo a expresarme en estos términos? Reconozco y venero a Francisco como sucesor de Pedro, vicario de Cristo. Pero Francisco no deja de ser Jorge Bergoglio. Ahora bien, yo conozco a Jorge Bergoglio desde hace cuarenta y cinco años. Es una "causa segunda". –En resumen, los cortos de vista se detienen en las causas segundas, los perspicaces van a la Causa Primera que lo gobierna todo infaliblemente.