Reino Unido: el gobierno facilitará el ministerio de los sacerdotes
El cardenal Vincent Nichols, arzobispo de Westminster, y Cressida Dick, comisaria en jefe de la policía de Londres, en el funeral de Sir David Amess
¿Se autorizará a los ministros de la religión católica administrar los últimos sacramentos en todo momento y en todo lugar de la vía pública? Esta es la probable consecuencia del crimen perpetrado por un islamista, que conmocionó recientemente al Reino Unido.
El caso provocó gran revuelo en todo el país: el 15 de octubre de 2021, mientras se encontraba en su oficina en Leigh-on-Sea (Essex, Reino Unido), Sir David Amess, un diputado conservador, fue asesinado a puñaladas por Ali Harbi Ali, un notorio islamista que tenía planeados varios otros actos terroristas en territorio británico.
Tan pronto como el Padre Jeff Woolnough, párroco de St. Peter en Leigh-on-Sea, supo del crimen, se apresuró a ir al lugar del incidente para conferir los últimos sacramentos al político conocido por su fe católica.
Los agentes de la policía que se encontraban afuera de la iglesia bautista donde se perpetró el asesinato, lugar que generalmente sirve como oficinas electorales del Partido Conservador en el municipio, transmitió la solicitud del Padre Woolnough, sin éxito: el párroco de St. Peter solo pudo rezar afuera el Rosario por el agonizante, sin poder atenderlo personalmente.
Esto generó distintas protestas en el Reino Unido: a raíz de la muerte de Sir David Amess, monseñor Mark Davies, obispo católico de Shrewbury, en el oeste del país, pidió a las autoridades que reconocieran finalmente la extremaunción y los auxilios conferidos a un enfermo como un "servicio de emergencia".
"Espero que esta tragedia haga posible que los cristianos se den cuenta de que la hora de la muerte es decisiva para la eternidad que sigue, y que vean a la Iglesia como un servicio de emergencia", declaró el prelado.
Los parlamentarios británicos, queriendo disipar la controversia, propusieron formalmente la "enmienda Amess" para garantizar que los sacerdotes católicos tengan la oportunidad de administrar los últimos sacramentos en las escenas del crimen, así como cualquier ministro de culto reconocido.
Esta idea fue presentada por el diputado laborista Mike Keane: “Sir David Amess participó plenamente toda su vida en los ritos de la Iglesia y su liturgia. Para los católicos, que creen que la extremaunción ayuda a guiar el alma a Dios después de la muerte, tal vez podríamos implementar la enmienda Amess para que, sin importar dónde se encuentren, en un asilo o en la escena de un crimen, un diputado, o cualquier otra persona pueda recibir este sacramento".
Por su parte, la Conferencia Episcopal de la Iglesia Católica en Inglaterra y Gales, comunica en su sitio web:
"El Cardenal Vincent Nichols y Cressida Dick, comisionada de la policía metropolitana, acordaron trabajar juntos para crear un grupo conjunto encargado de estudiar o negar el acceso a los sacerdotes católicos a las escenas de violencia traumática. En particular, el grupo considerará si se necesitan cambios en el asesoramiento brindado a los oficiales que enfrentan tales situaciones".
Fuentes: Catholic News Agency/cbcew.org.uk – FSSPX.Actualités
Imagen: Flickr / Catholic Church England and Wales (CC BY-NC-ND 2.0)