Un libro póstumo de Benedicto XVI
Titulado Che cos'e il Cristianesimo (¿Qué es el cristianismo?), este libro recopila 16 textos del período posterior a la dimisión de Benedicto XVI en 2013; la mayoría se escribieron alrededor de 2018, el último en 2022. Fue publicado por la editorial italiana Mondadori, el 18 de enero.
Oposición entre catolicismo y protestantismo
En un texto inédito, Benedicto XVI deplora que Vaticano II "no haya abordado el cuestionamiento fundamental del sacerdocio católico por parte de la Reforma del siglo XVI". Es una "herida que se siente hoy y que, en mi opinión, debe ser atendida de manera abierta y fundamental".
Benedicto XVI ve el error original de Lutero en su visión de una oposición irreconciliable entre el concepto sacerdotal del Antiguo Testamento y el sacerdocio conferido por Jesucristo. Sin embargo, la Iglesia primitiva ya había vinculado el sacerdocio del Antiguo Testamento con los ministerios del Nuevo Testamento y no veía la justificación por la fe y las obras como algo opuesto.
El culto protestante y la misa son fundamentalmente diferentes
Debido a sus fundamentos teológicos opuestos, "es bastante claro que la Cena [protestante] y la Misa son dos formas de adoración fundamentalmente diferentes y mutuamente excluyentes. Que lo recuerden los que hoy predican la intercomunión", advierte Joseph Ratzinger.
Benedicto XVI señala que en la reforma litúrgica "las tesis de Lutero jugaron un cierto papel tácito, por lo que algunos círculos pueden haber pretendido que el decreto del Concilio de Trento sobre el sacrificio de la Misa había sido abolido tácitamente".
Por lo tanto, expresa la sospecha de que la dureza de la oposición a la Misa antigua también se debió en parte al hecho de que algunos vieron en ella una idea de sacrificio y expiación que ya no era aceptable. –Esta doble observación es una justificación de las críticas hechas al Novus Ordo –en particular por el Breve Examen Crítico– que había detectado tanto esta influencia protestante como el rechazo del sacrificio expiatorio.
El mundo moderno acepta a Lutero mejor que al catolicismo
El difunto Papa emérito finalmente escribe: "Es evidente que el pensamiento moderno... se siente más cómodo con el enfoque de Lutero que con el enfoque católico. Porque una explicación de la Escritura que ve el Antiguo Testamento como un camino hacia Jesucristo es casi inaccesible al pensamiento moderno".
Diálogo con el islam
Benedicto XVI critica ciertos intentos de diálogo entre cristianos y musulmanes, que subrayan que tanto la Biblia como el Corán hablan de la misericordia de Dios. De ahí el imperativo de amar al prójimo. Pero también se afirma que ambos textos contienen llamados a la violencia.
El resultado es que, en cierto sentido, nos situamos por encima de las dos religiones y afirmamos que en ambas hay bien y mal y que, por tanto, es necesario leer la Biblia y el Corán con una hermenéutica del amor y de la violencia contraria teniendo en cuenta ambos.
Falsa tolerancia en Occidente
En otro texto, Joseph Ratzinger señala que "las grandes potencias de la tolerancia no conceden al cristianismo la tolerancia que propagan". Con su "manipulación radical del hombre" y "distorsión de los sexos por la ideología de género", se oponen claramente al cristianismo, escribe.
Y añade: "La intolerancia de esta aparente modernidad hacia la fe cristiana no se ha convertido todavía en abierta persecución, y sin embargo se manifiesta de forma cada vez más autoritaria con el fin de llegar, mediante una legislación adecuada, a la erradicación de lo que es esencialmente cristiano".
Finalmente, refuta la crítica de que la fe cristiana es intrínsecamente intolerante debido a su pretensión de verdad y universalidad. Esta visión se basa en la sospecha de que la verdad es peligrosa. Pero son las sociedades que se oponen a la verdad las que son intolerantes.
Según Elio Guerriero, coeditor, una condición imperativa de Benedicto XVI fue publicar el libro solo después de su muerte. "Por mi parte, no quiero publicar nada en vida. La rabia de los círculos contra mí en Alemania es tan fuerte que la aparición de la menor de mis palabras provoca inmediatamente un clamor asesino de su parte".
Fuente: Katolisch/InfoCatolica – FSSPX.Actualités