Una aplicación católica eliminada de la AppStore china

Fuente: FSSPX Actualidad

Alex Jones, creador de la aplicación Hallow

Hallow, una de las aplicaciones de oración más populares de la AppStore, ya no se puede descargar en China, después de que los mandarines rojos declararan su contenido "ilegal". Una decisión que indica un cierto nerviosismo del régimen chino ante el crecimiento del cristianismo, visto como una amenaza para el régimen vigente.

Hallow representa, según su creador Alex Jones, 18 millones de descargas en más de 150 países, 500 millones de oraciones y 200,000 reseñas de “cinco estrellas”. Esta herramienta dedicada a difundir oraciones católicas se ha convertido en la aplicación número uno de la AppStore seis años después de su lanzamiento en 2018, y hasta ahora era tolerada por las autoridades chinas.

Pero la historia se complicó en el primer trimestre de 2024, cuando Alex Jones fue abordado por el ensayista George Weigl quien le pidió autorización para difundir algunos pasajes de su biografía sobre el Papa Juan Pablo II, con la ayuda de Jim Caviezel, actor y director que se ha convertido en un ícono del catolicismo en Estados Unidos.

Fue así que durante el verano de 2024 se transmitió la serie Juan Pablo II Testigo de Esperanza, realzada con meditaciones dirigidas por monseñor James Shea, rector de la University of Mary, en Bismarck (Dakota del Norte, Estados Unidos).

Sin embargo, existe un inconveniente, aunque significativo para el régimen comunista chino: la serie evoca el papel del Papa polaco en el colapso del comunismo en su país, con las consecuencias que conocemos en Europa. Suficiente para asustar a los fieles censores del pensamiento del Gran Timonel, que rápidamente declararon el contenido “ilegal” y se apresuraron a bloquear la aplicación a partir del 15 de julio.

"Continuaremos tratando de servir a nuestros hermanos y hermanas en Cristo Jesús que están en China lo mejor que podamos a través de nuestro sitio y el contenido de nuestras redes sociales, y especialmente con nuestras oraciones", dijo Alex Jones a la Catholic News Agency, absteniéndose por prudencia de comentar los motivos de la eliminación de su aplicación. 

¿La actitud de las autoridades chinas muestra una cierta preocupación? Esto es lo que sostiene George Weigl en las columnas del National Catholic Register: “Los controles sociales cada vez más intrusivos del régimen muestran una población más temerosa que entusiasta por el modelo social promovido por Xi Jinping.

“El dinamismo de la democracia de Taiwán es un vivo reproche a la afirmación de que los chinos solo pueden ser gobernados de manera autocrática. Y a pesar de la represión y la persecución, el cristianismo chino sigue creciendo, incluso cuando el régimen lo controla con más fuerza”, subraya el ensayista.

Por no hablar del pesimismo económico que reina en China, donde los agentes económicos dudan en invertir, la crisis inmobiliaria que dura desde hace tres años, el aumento de la edad de jubilación: todos estos temas podrían poner en duda la legitimidad y gobernanza del Partido Comunista Chino.

Del lado de Santa Marta, el tono es más optimista. En el avión que lo trasladó desde Singapur el 12 de septiembre, el Papa declaró: "Estoy satisfecho con el diálogo con China. El resultado es bueno. (…) Es un gran país, admiro a China, la respeto. Es un país que tiene una cultura ancestral, una capacidad de diálogo para entenderse a sí mismo, que va más allá de los diferentes sistemas de gobierno que ha conocido". Pero incluso en la diplomacia, el método Coué tiene sus límites…