Los obispos polacos preocupados por la evolución del camino sinodal alemán

Fuente: FSSPX Actualidad

Monseñor Georg Bätzing y Monseñor Stanislaw Gadecki

En una carta al presidente de la Conferencia Episcopal de Alemania (DBK), Monseñor Georg Bätzing, el presidente de la Conferencia Episcopal de Polonia (CEP), Monseñor Stanislaw Gadecki, expresó su "profunda preocupación" por el camino que ha tomado la reforma alemana, y criticó enérgicamente los ejes de reflexión del Camino sinodal.

Monseñor Stanislaw Gadecki, arzobispo de Poznan, comienza su carta recordando los lazos que unen a la Iglesia de Alemania y a la de Polonia. Por ello, "expresa su profunda preocupación e inquietud por la información que se ha recibido recientemente de ciertos ámbitos de la Iglesia católica en Alemania".

El prelado expresa su preocupación "sobre el valor de las declaraciones hechas por ciertos círculos de la Iglesia católica en Alemania, en particular en el marco del 'Camino Sinodal'".

La Iglesia en Alemania influye en toda Europa

Monseñor Gadecki señala la influencia de la Iglesia de Alemania en Europa: es "consciente de que ella irradiará su fe o su incredulidad por todo el continente. Por lo tanto, me preocupan las acciones del Camino Sinodal alemán". Posteriormente enumera los puntos críticos.

La tentación de buscar la plenitud de la verdad fuera del Evangelio

El presidente de la CEP indica en primer lugar que la observación de los frutos del Camino Sinodal da la impresión de que el Evangelio no siempre es la base de la reflexión del sínodo alemán y que existe en particular una cierta tentación a creer en la infalibilidad de las ciencias sociales.

El prelado lo presenta de la siguiente forma: "Una de las tentaciones de la Iglesia hoy es comparar las enseñanzas de Jesús con los desarrollos actuales de la psicología y las ciencias sociales. Si algo en el Evangelio no está de acuerdo con el estado actual del conocimiento de estas ciencias, los discípulos, (…) tratan de 'actualizar' el Evangelio".

El prelado señala con pertinencia "que el estado del conocimiento científico evoluciona con frecuencia y a veces de forma espectacular. (…) La mutabilidad es inherente a la naturaleza misma de la ciencia, que solo dispone de un fragmento de conocimientos posibles. El descubrimiento de errores y su análisis es el motor del progreso de la ciencia".

A esto hay que añadir las falacias ideológicas. "Subyacen, por ejemplo, al cambio de actitud hacia la sexualidad que se puede observar hoy. El desarrollo del conocimiento no se detiene con nuestra generación. Las generaciones que nos sucedan tendrán que dejar de lado los libros de psicología o de ciencias sociales, hoy considerados infalibles".

La tentación de vivir con un complejo de inferioridad

"Los católicos, afirma monseñor Gadecki, en Alemania, pero también en Polonia, viven bajo la presión de la opinión pública, lo que hace que muchos de ellos sufran una especie de complejo de inferioridad", y exhorta a monseñor Bätzing a no ceder a las presiones del mundo y los modelos de la cultura dominante, ya que esto puede conducir a la corrupción moral y espiritual.

También lo invita a evitar "la repetición de consignas desgastadas y afirmaciones banales como la abolición del celibato, el sacerdocio de la mujer, la comunión para los divorciados y la bendición de las uniones entre personas del mismo sexo. La 'actualización' de la definición del matrimonio en la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea no es razón para cambiar el Evangelio", concluye.

La tentación del pensamiento corporativista

El prelado es consciente "de que la Iglesia en Alemania pierde fieles regularmente y que el número de sacerdotes disminuye año tras año. Por lo tanto, la Iglesia busca formas de conservar a sus fieles y alentar a los jóvenes a elegir el sacerdocio.

Sin embargo, al hacerlo, parece enfrentarse al riesgo del pensamiento corporativo: "no hay suficientes empleados, así que reduzcamos los criterios de contratación". Esto explica la reivindicación de la abolición de la obligación del celibato sacerdotal, así como la cuestión de la ordenación de las mujeres. El prelado recuerda que en este último punto la cuestión está definitivamente resuelta.

Finalmente, monseñor Gadecki señala que "el Camino sinodal ha aprobado la práctica errónea y escandalosa de bendecir las relaciones homosexuales, e intenta modificar la enseñanza de la Iglesia sobre la pecaminosidad de los actos homosexuales". Aprovecha también para recordar la reciente condena de esta bendición por parte de la Congregación para la Doctrina de la Fe.

La tentación de sucumbir a la presión

El arzobispo de Poznan pone el ejemplo del Papa Pablo VI, cuando fue fuertemente criticado por su posición sobre la anticoncepción en la encíclica Humanae vitae, y explica a Jean Guitton que se hizo un servicio a la humanidad para preservar el ideal de la santidad.

Esta carta tiene el mérito de ser honesta y valiente . Destaca los principales puntos en los que el Camino sinodal ha abandonado la fe, y algunas razones que subyacen a este desliz. Queda por esperar si los destinatarios tendrán en cuenta la advertencia.