Sri Lanka: las declaraciones de un expresidente generan polémica

Fuente: FSSPX Actualidad

Maithripala Sirisena, quien fue presidente de Sri Lanka del 9 de enero de 2015 al 18 de noviembre de 2019, provocó un pequeño terremoto en el país al afirmar que conoce a los verdaderos autores o instigadores de la masacre de Pascua de 2019.

Recuento de los hechos

El 21 de abril de 2019, día de Pascua, ocho ataques contra dos iglesias católicas, un templo protestante, tres hoteles de lujo, una casa de huéspedes y un complejo inmobiliario, causaron la muerte de 269 personas, entre ellas 42 extranjeros, y dejaron 500 heridos. Los ataques fueron reivindicados por la organización Estado Islámico.

Los sucesivos gobiernos llevaron a cabo investigaciones sobre el ataque. Hubo detenciones seguidas de sentencias. Pero la Iglesia católica rechazó los informes estatales alegando que no identificaban a los autores de la violencia. Líderes católicos, incluido el cardenal Malcolm Ranjith de Colombo, encabezaron varias protestas y también pidieron una investigación internacional.

Anteriormente, un tribunal condenó al expresidente Sirisena a pagar 100 millones de rupias (300,000 euros) en compensación por la falta de vigilancia. En efecto, el 11 de abril de 2019, los servicios de inteligencia de Sri Lanka advirtieron que un movimiento islamista estaba planeando “ataques suicidas contra importantes iglesias católicas y la embajada de la India”.

Las revelaciones del expresidente

En declaraciones a algunos periodistas en Kandy, el 22 de marzo, Maithripala Sirisena dijo que estaba dispuesto a revelar circunstancias hasta ahora mantenidas en secreto. Asimismo, añadió que está solicitando al tribunal que lo proteja y le prometa confidencialidad porque la divulgación pública de esta información sensible podría dañarlo a él y a su familia.

“Los sospechosos actualmente detenidos en relación con los ataques son delincuentes menores. Los verdaderos culpables siguen prófugos. Estoy dispuesto a arrojar luz sobre los autores de los atentados del domingo de Pascua si soy convocado ante el tribunal”, prosiguió, aunque añadió que había mantenido esta información en secreto y que “es esencial que los jueces hagan lo mismo”.

Sirisena dijo que supo quienes son los verdaderos culpables hace solo tres semanas. Aceptó testificar a puerta cerrada. “Si el Tribunal me cita, compareceré y declararé bajo acuerdo de confidencialidad. Temo por mi seguridad y la de mis hijos, y también por la de otros miembros de mi familia si tuviera que declarar en un tribunal público”, afirmó.

Las declaraciones del político no pasaron desapercibidas. “Si el gobierno actual realmente tuviera valor, el expresidente Sirisena debería ser arrestado inmediatamente”, declaró el Padre Rohan Silva, director del Center for Social and Religions. También recordó que la Iglesia católica siempre ha sostenido “que hay autores intelectuales detrás de estas masacres”.

"Hacemos un llamado al presidente, al ministro de policía y al CID (Criminal Investigation Department) para que arresten inmediatamente al expresidente, lo interroguen y tomen las acciones legales necesarias contra él", agregó.

La parlamentaria católica Kavinda Jayawardena presentó una denuncia ante el CID, acusando a Sirisena de ocultar información vital relacionada con el ataque durante casi cinco años. Lo criticó por no revelar esta información a pesar de haber comparecido varias veces ante el CID.

La exministra y actual diputada Vijitha Herath se hizo eco de sentimientos similares. “Después de permanecer tanto tiempo en silencio, ahora afirma saber quién perpetró el ataque. Es grave que haya llevado a cabo semejante encubrimiento”, declaró a los medios el 24 de marzo.