Un millón de católicos polacos rezaron el Rosario en las fronteras de su país

Fuente: FSSPX Actualidad

El "Rosario en las Fronteras" se llevó a cabo el 7 de octubre del 2017, fiesta de Nuestra Señora del Rosario. Esta gigantesca muestra de fe atrajo a cientos de miles de polacos católicos, quienes se reunieron para rezar el Rosario a lo largo de los 3,500 kilómetros de la frontera del país.

Una iniciativa de la asociación Solo Dios Basta (el nombre es tomado de la oración de Santa Teresa de Ávila), esta cruzada del Rosario recibió la aprobación de los obispos polacos, quienes "hicieron un llamamiento a todos los fieles para apoyar esta iniciativa."

Una carta de los obispos

La declaración publicada en el sitio web de la Conferencia  Episcopal de Polonia, el 20 de septiembre, decía lo siguiente: "Nos acercamos al centenario de las celebraciones de las apariciones marianas en Fátima. Hace cien años, la Virgen María hizo a estos tres niños portugueses un llamamiento a la salvación: 'conviértanse, ofrezcan reparación por los pecados cometidos contra mi Corazón Inmaculado y recen el Rosario'Una forma especial de realizar este llamamiento es la iniciativa nacional llamada Rosario en las Fronteras. El objetivo es que las personas recen el Rosario por Polonia, y por el mundo entero, a lo largo de las fronteras de nuestro país, y que todos lo recemos juntos - clero, miembros de las órdenes religiosas, laicos adultos y niños."

Los organizadores explicaron sus intenciones en su sitio web “Różaniec do granic, Rosary on the Borders”, cuyo subtítulo es "Al fin, mi Corazón Inmaculado triunfará": "A través de este rezo sin precedentes del Rosario, queremos mostrar fidelidad y obediencia a la Virgen María, quien nos llama sin cesar a rezar el Rosario. También queremos pedir perdón y reparar todas las blasfemias y ofensas contra el Inmaculado Corazón de María. Deseamos implorar la intercesión de la Madre de Dios para salvar Polonia y el mundo. Creemos que si un millón de polacos rezan el rosario a lo largo de la frontera del país, no sólo puede cambiar el curso de los acontecimientos, sino también abrir los corazones de nuestros compatriotas a la gracia de Dios."

Maciej Bodasiński, una de las fundadoras de la asociación Solo Dios Basta, explicó al diario en línea canadiense y estadounidense Lifesitenews: "Queremos rezar por la conversión a Cristo de Polonia, Europa y el mundo entero, para que más almas se salven de la condenación eterna y encuentren su camino hacia Dios."

Oración a escala nacional

 

La oración nacional inició a las 10:30 a.m. en 320 iglesias de las 22 diócesis de las fronteras del país, según informó el canal católico Radio Marija en su sitio web la tarde del 7 de octubre. Los participantes asistieron a una conferencia, luego de la cual se celebró una Misa seguida de la adoración del Santísimo Sacramento. Después de una cena ligera, los fieles se dirigieron a sus lugares de oración designados a lo largo de los 3,500 kilómetros de la frontera, desde las montañas hasta el Mar Báltico, para rezar el Rosario a las 2:00 p.m.

Hay quienes han acusado al evento de tener intenciones anti-Rusia, como lo hizo el sitio web italiano La Nuova Bussola Quotidiana: "El diario polaco de izquierda La Gazeta Wyborcza desacreditó el evento, alegando acusaciones de que la intención del Rosario era dirigida contra Rusia. A lo cual Maciej Bodasiński respondió en su entrevista con Lifesitenews: 'No es así, y la oración jamás puede ser en contra de alguien. La oración nunca va dirigida contra alguien, siempre es para alguien. De otra forma, sería una maldición."

AFP dijo sobre el Rosario en las Fronteras que "el episcopado insistió en que fuera únicamente una iniciativa religiosa", pero muchos círculos "ultra católicos" y varios participantes la vieron como "un arma espiritual" contra lo que ellos llaman la "islamización" de Polonia y Europa." RFI declaró que Maciej Bodasinski "no dudó en proclamar que el islam es un peligro para la civilización católica y para Polonia", y deseó "hacer frente a este peligro con oración y con la fuerza de la fe", añadiendo que "la desconfianza de cierta parte de la población hacia el islam es apoyada por la Iglesia católica y por el gobierno, que se rehusa a acoger a los refugiados sirios en su territorio. Sin embargo, Polonia está prácticamente libre de inmigración musulmana. Los únicos extranjeros que han llegado al país en grandes cantidades son los ucranianos."

Sobre este punto, Maciej Bodasinski respondió a Lifesitenews: "En vista de la creciente tensión, las amenazas de guerra y el terrorismo, queremos rezar para pedir paz para el mundo. Pero la paz se entiende no sólo como la ausencia de guerra, sino como la paz de Dios, la paz del corazón. Muchas personas que se han convertido dicen que éste es el mayor regalo que han recibido del Creador - paz en el corazón. Pase lo que pase, confías [en Dios], y estás tranquilo. Pedimos paz para la gente, entre la gente y entre las naciones."

Una demostración de fe

 

El 8 de octubre, el vaticanista italiano Marco Tosatti elogió esta "demostración de fe dada por cientos de miles de católicos polacos" y se preguntó cómo es que "una demostración tan impresionante de devoción popular no recibió eco en las palabras del soberano pontífice durante el Angelus dominical." En su blog, mencionó la iniciativa lanzada por la AIASM (Asociación Italiana de Santuarios Marianos): "En Italia, una gran cantidad de personas rezará el Rosario a lo largo de todo nuestro país el viernes 13 de octubre, a las 5:30 p.m., siguiendo las enseñanzas de María y el hermoso ejemplo de nuestros hermanos polacos, ayunando y rezando el Rosario, la iniciativa más poderosa para la paz."

La fiesta de Nuestra Señora del Rosario fue instituida el 7 de octubre de 1571, día de la victoria naval de Lepanto, cuando los buques de guerra de la Liga Santa triunfaron sobre la flota, considerablemente mayor, de los turcos otomanos. El Papa Pío V exhortó al mundo cristiano a rezar el Rosario, y ordenó que las iglesias permanecieran abiertas día y noche. La victoria cristiana preservó el destino espiritual, cultural y político de Europa, y San Pío V conmemoró esta fecha como la fiesta de "Nuestra Señora de las Victorias". Su sucesor, Gregorio XIII, más tarde cambiaría el título de la fiesta a su forma actual: "Nuestra Señora del Rosario."